ALICANTE. Solo tiene 15 años y su carrera acaba de despegar, pero cualquiera lo diría. El 2023 ya fue un año entretenido para Charo Esquiva, pero esta joven tenista bigastrense del Club de Tenis Torrevieja-Los Balcones quiere que el 2024 lo sea aún más.
Reconoce que le gusta más jugar en pista dura, sobre cemento, pero lo que deja claro es que tiene los pies sobre la tierra (batida). Charo Esquiva mira al futuro con decisión, tanta o más que con la que golpea la pelota. El tiempo dirá, pero por esfuerzo y trabajo diario no va a ser. Tampoco por apoyos. Ahí está su familia, sus entrenadores y su patrocinador principal.
- Pregunta: ¿Qué se siente cuando lees, oyes que nos referimos a ti como "una de las grandes promesas del tenis español"?
- Respuesta: Pues un orgullo muy grande, al final quiere decir que estoy haciendo las cosas bien. Eso sí, intento mantener los pies en el suelo y pensar en el futuro y no en el ahora; todo lo que estoy haciendo es para ganarme la vida con el tenis en el futuro. Carlos Alcaraz, Paula Badosa, Garbiñe Muguruza también eran promesas y fueron subiendo.
- P: Una bigastrense de 15 años que entrena en Torrevieja como una de las grandes promesas del tenis español. Hay que tener la cabeza muy amueblada para no descentrarse. Entiendo que el papel de tu entrenador Emilio Viuda y tu familia es fundamental...
- R: Emilio, mi familia, pero también otras personas como Eduardo Cervelló con el que trabajo el aspecto psicológico. Hay que afrontar todo esto con humildad, tener presente de dónde vienes, todo lo que has hecho y todo lo que queda por hacer, todo lo que tengo que hacer para conseguir mis metas.
- P: Se puede decir que llevas toda la vida jugando al tenis. ¿Cuándo dices "esto es lo mío" o "mamá, papá yo me quiero dedicar a esto"?
- R: Desde muy pequeñita, desde que tenía seis o siete años. He crecido viendo jugar a Rafa Nadal y a Roger Federer y tengo claro que esto es lo mío y que es a lo que quiero dedicar mi vida. Todavía me queda mucho camino por delante, pero creo que voy bien y si sigo trabajando y haciendo las cosas como hasta ahora puede que se cumpla el sueño de llegar a ser una tenista profesional.
- P: Háblame de Emilio Viuda, de tu entrenador, porque tu carrera hasta el día de hoy va ligada a él. ¿Cómo entráis en contacto y quién es para ti, qué representa tu entrenador para ti?
- R: Emilio Viuda y David Pérez, trabajo con los dos de siempre. Nos conocimos cuando me apunté a un campus de verano en el Club de Tenis Torrevieja hace como ocho años y desde entonces. Son como familia, un apoyo fundamental dentro y fuera de la pista. Son exigentes, me han inculcado que el trabajo es importante, pero también son divertidos cuando toca.
- P: Tienes 15 años y actualmente eres la decimosexta en el 'junior ranking' de la Federación Internacional. ¿Lo miras mucho, no necesitas hacerlo porque te lo sabes de memoria o es algo secundario que solo nos vale a la prensa para rellenar líneas?
- R: Ni lo miro diariamente, ni me vuelvo loca si subo o bajo un puesto. Salvo contadas excepciones, dentro del 'top' 100 el nivel es muy parecido y, de hecho, yo he perdido con gente que estaba detrás de mí en la clasificación y ganado a gente que estaba delante. Eso no quiere decir que no sea algo justo, al final tu posición es reflejo de tu trabajo, pero yo apuesto por centrarme en el juego, tácticas y en lo que tengo que hacer.
- P: ¿Qué tenista te ha dado más guerra en un pista?
- R: Reconozco que tengo algunas espinitas clavadas, partidos importantes que no he podido ganar, pero rivales, rivales... Alena Kovackova. Es una tenista checa de mi edad, que tiene un gran nivel y siempre me lo pone muy difícil. He jugado con ella en Benicarló y en Sanxenxo y me ha ganado.
- P: ¿A cuántos aviones te subiste en 2023?
- R: Pues una burrada, como unos 50. Bastantes más de los que pensaba al principio del año, cuando estaba la 700 del 'ranking' y tenía 100 puntos. Empecé el año muy bien, subí en el 'ranking' y eso me permitió ir jugando torneos más prestigiosos como los del Grand Slam. Se puede decir que a principios de año di un paso adelante a todos los niveles y de ahí lo que vino después.
- P: Y ahora que el 2024 sea aún mejor...
- R: Ese es el objetivo, pero va a ser un año más difícil porque además de torneos júnior voy a jugar profesionales, del WTA Tour y ahí me voy a medir a jugadoras mayores. Me veo capacitada eh, el año pasado jugué un WTA25 en Vigo y llegué a semifinales, pero va a ser un año duro.
- P: Hablemos de golpes, eres diestra...
- R: Sí, creo que tengo un buen golpe de derechas. Mi revés hace un año era inferior y ahora está más equilibrado con mi derecha y el saque lo estoy mejorando; he hecho un par de cambios, cada vez saco más a las esquinas, llevo la pelota más a donde quiero y, sobre todo, estoy elevando el porcentaje de primeros servicios.
- P: ¿Superficie preferida?
- R: Pista dura, cemento.
- P: Esa respuesta no me la esperaba (risas).
- R: (Risas) Mi juego me ayuda más en pista dura, sobre cemento; me gusta más, siento la bola mejor. Es algo que noto contra las jugadoras españolas: todas entrenamos y jugamos en tierra batida y mis golpes planos les cuestan más. Ah, con una extranjera que está habituada al 'indoor' jugar en tierra batida también me da cierta ventaja.
- P: ¿Algo que se te dé mejor que el tenis?
- R: Es complicado, tengo una habilidad con la raqueta, un don que me dio mi madre al nacer (risas). A ver, he hecho otras cosas, de hecho hasta hace dos años estaba en el conservatorio: el gusto por la música es algo que mi padre me ha inculcado como músico que es, pero al final me tuve que decidir por una cosa y me decanté por el tenis.
- P: ¿Y otro deporte?
- R: Pues el fútbol. Es un deporte que siempre me ha gustado y en el colegio se me daba bastante bien. Y bueno, soy del Real Madrid a muerte.
- P: París, Wimbledon, Nueva York, Melbourne... esta temporada otra vez, para empezar.
- R: Son espectaculares, el ambiente, la organización, son increíbles. Hay que conseguir los puntos para estar en Roland Garros y de ahí a Wimbledon y al US Open. A darlo todo.
- P: Vienes de competir con el equipo español en el Europeo sub-16. ¿Qué sientes defendiendo la camiseta de España?
- R: Me cuesta describirlo eh, es una sensación de orgullo muy grande. Representar a tu país, que la Federación confíe en ti para que compitas con la camiseta de España ante otras naciones, es un inmenso orgullo. Te confieso que no siento lo mismo que cuando juego un torneo a título individual. Y en el Europeo, pues fuimos las primeras en la fase de grupos y terminamos terceras; ganamos a Turquía, a Alemania en el tercer y cuarto puesto, pero Suecia fue mejor y hay que felicitarlas.
- P: El apoyo de la familia lo tienes, es evidente, pero también el de TM Grupo Inmobiliario, tu patrocinador principal. Tanto unos como otros, ¿en qué te ayudan?
- R: Lo son todo. Mi familia por razones obvias, es una pilar fundamental. Desde pequeña han estado siempre ahí, apoyándome, ayudándome y sin meterme presión que es algo que en este deporte es muy importante porque en caso contrario creo que todo es más difícil. Y de TM Grupo Inmobiliario qué te voy a decir, es que a nivel deportivo me lo dio todo cuando no tenía nada; su apoyo ha sido clave para poder entrar en el circuito del tenis profesional, competir de una manera más profesional.
- P: ¿Cómo es un día entre torneos?
- R: Pues gira alrededor del tenis porque todo lo que haces tiene su reflejo en la pista, para bien y para mal. Me levanto a las ocho de la mañana, desayuno y a calentar y entrenar; luego pausa para la comida y a calentar para jugar un partido o una segunda sesión de entrenamiento. Estiramientos, ducha, baño de hielo, un poco de bicicleta y a casa para cenar y dormir. Como te digo, todo lo que haces en un día tiene reflejo en la pista; por ejemplo, me gustaría desayunar por las mañanas un 'croissant', pero no lo hago (risas).
- P: ¿Cuáles son tus objetivos deportivos a corto, medio y largo plazo?
- R: A corto plazo hacerlo bien en un Grand Slam; mi favorito es el US Open, pero Roland Garros sería también algo muy especial. A medio, en un par de años, entrar en el 'top' 250 del 'ranking WTA' y a largo plazo en el 50.
- P: ¿Una tenista, en activo o no, en cuyo espejo te gustaría verte reflejada, por su tenis, forma de ser y no exclusivamente por los éxitos?
- R: Mira, mi referencia desde pequeña por su intensidad, carácter es una tenista que ahora precisamente está pasando un momento duro, la rumana Simona Halep.
- P: Intenta definir tu juego con tres adjetivos.
- R: Si tengo que decantarme por tres te diría que agresivo, defensivo y fuerte. Soy agresiva y defensiva, siempre cuando toca, y luego mentalmente fuerte.
- P: ¿Y en qué tiene que mejorar?
- R: En muchos aspectos, si la suerte es que tengo mucho margen de mejora. Te he hablado antes del saque, que es algo en lo que he cogido buen rumbo, pero se puede mejorar. También me gustaría revertir cierta actitud negativa que aparece en algunos partidos.
- P: Botar determinadas veces la pelota, ajustarse el pantalón o la falda, tocarse el pelo, la frente... ¿Alguna 'superstición', manía o gesto que repitas antes de saltar a la pista, de sacar, etc.?
- R: (Risas) no soy muy maniática, pero tengo. Me gusta repetir la misma rutina que he seguido cuando he ganado: si comí pasta con carne antes del partido, pues pasta con carne antes del siguiente. Y bueno, en la pista, si el juego va bien, la bola debe seguir siendo la misma (risas).
