César Sánchez pide moderación al Consell, el PP, la dimisión de Marzà

ALICANTE. El presidente de la Diputación alicantina ha salido al paso de unas declaraciones de la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, de Compromís, al término del pleno del Consell, reunido hoy en Alicante, en las que ésta le ha "animado" a dedicarse "a sus competencias" provinciales, ejercer "lealtad institucional" hacia la Generalitat y ocuparse de sus ayuntamientos si pretende retomar el clima de diálogo con el Gobierno valenciano.

"La ciudadanía necesita un Consell moderado que entienda que la sociedad valenciana es plural, que entienda que se es valenciano en valencià y en castellano, un Consell que hable con las personas y con el resto de administraciones, que busque el consenso y que abandone el decreto y la imposición", ha opinado.

Sánchez ha demandado, asimismo, "un Gobierno que respete la justicia, que no practique la insumisión, que nos represente a todos, hablen valenciano o castellano, vivan en Orihuela o en Vinaròs, y no solo a los que piensan de una forma".

Así, el popular ha insistido en la necesidad de que el Consell trabaje para que la Comunitat Valenciana esté en España y "que no fomente que lo español se sienta foráneo en nuestro territorio, como han intentado en materia de educación con el pseudo decreto de Plurilingüismo".

Además, ha exigido a los socios del tripartito que "mediten los cambios y que no vivan con la ansiedad de saber que se les acaba el tiempo", ya que, ha añadido Sánchez en el comunicado, los valencianos "deseamos un Consell sensato, coherente y en positivo".

Dimisión de Marzà

Por su parte, el PP de la provincia Alicante pedirá en los ayuntamientos la dimisión del conseller de Educación, Vicent Marzà, y abrir un nuevo periodo de matriculación en los colegios para que las familias puedan modificar la línea elegida de sus hijos, a raíz del auto del Tribunal Superior de Justicia (TSJCV).

En un comunicado, los populares han acusado a Marzà de "desobedecer los autos del TSJCV que anulan el decreto de chantaje lingüístico" y han asegurado que esta actitud "no se puede consentir en un Estado de Derecho", por lo que exigen su dimisión inmediata.

El PP de Alicante ha opinado que esta situación "puede producir daños irreparables al alumnado" por lo que insisten en que las familias que ya han presentado la solicitud de admisión tengan la posibilidad de modificarla con un nuevo proceso de matriculación. Así, el presidente del PP, José Císcar, ha destacado que "el comportamiento de Marzà es especialmente dañino para alumnos y familias, algo que el PP no puede dejar pasar por alto". Los alcaldes y portavoces populares en los municipios han respaldado la iniciativa de forma unánime.

Esta declaración ha sido uno de los acuerdos más destacados en una reunión que supone un nueva etapa para el PP en la provincia. Císcar ha destacado que los populares han cambiado "el chip con la intención de estar a punto para las elecciones de 2019 y recuperar los municipios de los gobiernos multipartitos que tanto mal están haciendo".