Participación de Cervic en la feria Tecma 2024. Foto: APIBI. La empresa de Ibi Cervic Environment, que produce papeleras para el reciclaje y mobiliario urbano duplica prácticamente sus instalaciones. De este modo, pasa de una nave de 5.000 metros cuadrados a sumar otra de 4.000 metros cuadrados y alcanza los 9.000 metros cuadrados en el municipio ibense. El motivo de la ampliación es la de crear un hub productivo formado por varias naves comunicadas entre sí, desde donde se llevará a cabo el proceso integral de diseño, producción, ensamblado y logística. De esta forma, la empresa podrá seguir con la estrategia de crecimiento y expansión, manteniendo un único centro productivo desde el que suministrar sus productos a nivel mundial.
Según las últimas cuentas depositadas por la compañía, las de 2022, la facturación de la empresa crecía en un 48,5% y pasaba de los 2,62 millones en 2021 a los 3,89 millones de euros en 2022.
La empresa surte de este tipo de mobiliario en todo el mundo y, recientemente, ponían sus papeleras de recogida selectiva en el Zoo Sodas en Lituania y la Fundació Puigvert de Barcelona, ya en el país, a través del distribuidor Avant Serveis i elements Urbans, ha equipado recientemente sus espacios exteriores e interiores con mobiliario urbano, así como el Parque Warner en Madrid. La compañía pertenece a la Asociación de Empresarios de la Foia de Castalla (Ibiae) y es una empresa familiar con más de 55 años de historia, líder en España y con presencia en más de 37 países.
Como ha venido contando este diario, varias empresas industriales vienen creciendo en la Foia de Castalla. Por ejemplo, la multinacional canadiense CCL Label, líder en etiquetas y embalajes, consolida su expansión en la zona con la apertura de una nueva planta de producción en Tibi, que está centrada en la fabricación de 'shrink sleeves' sostenibles, conocidas como fundas termoencogibles, que vienen a convertirse en una segunda piel del envase y permiten una fácil separación, lo que favorece el reciclaje.
Además, la firma Bru y Rubio, que desde Ibi comercializa gamas de componentes para moldes de inyección como portamoldes, elementos normalizados, placas ciegas, cámara caliente y todos los accesorios necesarios para moldes de inyección, amplían su capacidad producción con 2.500 metros cuadrados de instalaciones. Y lo hacen, en respuesta al "significativo" aumento en sus inventarios de productos terminados y materias primas. Por otra parte, Obleas Quintín, con 116 años de historia y dedicada a la fabricación de oblea y galleta para dulces. La compañía ha invertido más de 2 millones de euros en líneas nuevas de producción y en 2024 va a seguir una estrategia de expansión en diferentes mercados tanto europeos como fuera de Europa.
