Joaquín Pérez, presidente (i) y Joaquín Garrido, vicepresidente de Cedelco (d) / PEPE OLIVARESELCHE. Tal y como habían avanzado, los empresarios asociados del Círculo Empresarial de Elche y Comarca (Cedelco) se han vuelto a ofrecer para mediar con el escollo del Mercado Central, preocupados por el aspecto que muestra parte del Centro de la ciudad y su comercio. Sin entrar a valorar y echar más leña al fuego sobre qué es lo que más conviene al viejo inmueble, opinan que “sin Mercado Central, el centro va a morir”. No obstante, frente a los hipotéticos 300 vehículos que tendría el aparcamiento de Aparcisa, opinan que son necesarios 3.000 para revitalizar la zona céntrica, además de decantarse ya por una solución, sea cual sea el proyecto elegido.
Por otra parte, lo que también plantea Cedelco son algunos flecos que quedan en el aire, como qué pasará con los placeros si se rescinde el contrato y cómo afectará esto a la sociedad en general. En ese sentido, estiman que “un proyecto aprobado se paraliza, sucede que toda la zona afectada entra en un estado de abandono hasta que ese u otro proyecto se ejecuta”, por lo que aseveran que la paralización podría alargarse dos años más en el caso de que arranque el proyecto existente, u ocho en el caso de que se vaya a los tribunales. Estiman que en el segundo caso, se vería “cómo los comercios del centro van cerrando”.
A este respeto, según la patronal, “la empresa adjudicataria, está haciendo todo lo posible por llegar a un entendimiento, pero de no existir un consenso, la Ley les da la opción de pleitear en los tribunales”. En ese supuesto, se alinean con la afirmación que se ha venido haciendo desde el entorno de la concesionaria, por el cual la indemnización del pleito rondaría los 15 millones de euros que saldrían de las arcas municipales. Además, creen que la paralización del mercado podría crear “una grandísima inseguridad jurídica para cualquier empresario, perjudicando seriamente futuras inversiones en nuestra ciudad, cuando es una realidad que para el crecimiento de cualquier ciudad la inversión es imprescindible”. También sacan a la palestra el asunto de los placeros del mercado provisional, reflexionando sobre dónde irían en el caso de que la empresa retirase el proyecto.
Con todo, y hablando sobre la peatonalización, aseveran que esta ha de ir combinada con plazas de aparcamiento, por lo que proponen diez veces más para todo el centro de los previstos para el aparcamiento de Aparcisa. Además, argumentan que si los que hay en el perímetro no están llenos, es porque precisamente el centro no ejerce como polo de atracción. “Como empresarios, como ciudadanos, miramos la situación y no podemos más que preocuparnos por un centro sin mercado, una zona que está sufriendo el cierre de sus comercios como consecuencia de esta paralización. No podemos mirar hacia otro lado y contemplar cómo se van a necesitar 10 años para dar una solución al mercado central, mientras los pequeños comercios mueren”, aseguran desde el empresariado.
Por último, apelan a todos los agentes implicados a que miren la situación con objetividad y a que se decanten por alguna de las tres opciones que hay: impulsar el proyecto aprobado y asumir las consecuencias políticas y sociales, negociar una variación del proyecto original con Aparcisa —la que parece más inverosímil porque dejaría a medias tintas a Ayuntamiento o mercantil—, o impulsar un nuevo proyecto, con los consensos necesarios, “midiendo las consecuencias económicas, políticas y sociales, ya que sería necesaria una negociación con la adjudicataria para llegar a un acuerdo económico como compensación por la rescisión del contrato”, sentencian desde Cedelco.
