La localidad de Montán ha puesto en marcha una novedosa iniciativa titulada ‘La Guardería Forestal’ que se pone en marcha coincidiendo hoy con la celebración del Día del Árbol en este municipio del Alto Mijares. Se trata de una experiencia que, como explica el alcalde, Sergio Fornas, “implica a los más pequeños del pueblo en el proyecto de reforestación que estamos llevando a cabo desde el Ayuntamiento con especies de árboles autóctonos y resistentes al fuego”.
Hasta ahora el municipio celebraba esta jornada de una forma más tradicional: animando a los niños a trasplantar árboles en el monte. Pero estos pequeños árboles, que cede a la localidad el Cief (Centro para la Investigación y la Experimentación Forestal) de El Toro “suelen ser tan pequeños, que por las simples condiciones climatológicas, no sobreviven”. De ahí que este año la apuesta sea diferente: estas pequeñas plantas se ubican en macetas y cada alumno de Montán se la lleva a su casa para cuidarla durante los próximos dos años y, “una vez esté consolidada y sea más fuerte, se llevará al monte y se trasplantará”, ha explicado el alcalde.
En el caso de Montán, cabe recordar, que es una de las localidades con mayor riqueza ambiental de la provincia al contar con bosques y un elevado patrimonio paisajístico en su entorno y, tal y como explica el alcalde, “nuestro propósito es implicar a las nuevas generaciones en el cuidado y los valores ambientales”.
El Ayuntamiento de Montán ha decidido aprovechar la celebración del Día del Árbol para promover la reforestación de algunos de los espacios más importantes del municipio, especialmente los perjudicados por el incendio de hace dos años. Con esa premisa, el Ayuntamiento suma esfuerzos e implica tanto al CIEF como al alumnado del Aulario de Montán.
En este proyecto de reforestación el Ayuntamiento apuesta por la xerojardinería, es decir, por elementos autóctonos propios del bosque mediterráneo valenciano y, sobre todo, que necesiten poca agua. Por otra parte, se hará esto en contraposición con el pinus halepensis, el pino carrasco común, que en este momento está en todas partes y que, además, es pirófilo, por lo que se que quema y propaga el fuego con mucha facilidad. Por eso, el Ayuntamiento apostará por especies piroresistentes como la morera o el ciprés, pero siempre propios del bosque mediterráneo.
Un proyecto para crear una barrera vegetal de protección
Y es que esta acción llevada a cabo por el Ayuntamiento de Montán forma parte de un proyecto más ambicioso que está llevando a cabo ya desde el año pasado y cuyos resultados se irán percibiendo de forma más notable a medio plazo. Y es que, dentro de la parcela medioambiental, está creando barreras verdes de protección. En el incendio de marzo de 2023, la existencia de una faja de autoprotección urbana fue determinante a la hora de que el fuego no avanzara en el barrio de las Eras.
Fornas ha explicado que “ahora pretendemos reforzar esa auto protección desarrollando una barrera vegetal basada en los principios de la xerojardineria y la utilización de plantas piroresistentes”.
La xerojardineria apuesta por la inserción de plantas autóctonas adaptadas al territorio y cuyas necesidades hídricas son mínimas y las plantas piroresistentes, que se trata de elementos de la flora que dada la acumulación de agua en su estructura ante un incendio son más difíciles de quemar y, además, le suponen al incendio un menor aporte de calor ya que la humedad evaporada reduce la intensidad y velocidad del incendio.
Vista la necesidad de algún árbol que cumpla todas estas especificaciones, el Ayuntamiento de Montán apostará por la utilización de las moreras para crear esta barrera vegetal. Una planta que es piroresistente, es autóctona y, además, es un elemento de alto significado para la población, ya que los monjes Servitas hicieron de ella la protagonista del desarrollo de una nueva ganadería introducida por estos, como fue la cría del gusano de seda.