VALÈNCIA. Un total de total de 167.887 valencianos residían en el extranjero a comienzos del presente año, lo que supone un crecimiento del 4,5% respecto a inicio de 2023. De ellos, más de 90.000 procedían de la provincia de Valencia; 60.000, de Alicante; y 15.000 de Castellón. En el conjunto de España el número de ciudadanos que viven en otros países superaba los 2,9 millones.
Así se desprende de la Memoria sobre la Situación Socioeconómica y Laboral del 2023 elaborada por el Comité Econòmic i Social de la Comunitat Valenciana (CES-CV). El documento, presentado el pasado jueves, parte de datos del padrón municipal publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) a 1 de enero de 2024 para explicar esta cuestión.
Siguiendo con las cifras autonómicas, si se atienden a las edades de estas personas, la gran mayoría (111.163) se sitúa en la franja de entre 16 y 64 años. A ellos se añaden un total de 31.544 personas menores de 16 años y otras 25.210 con una edad igual o superior a los 65 años.
Si se analiza por destinos, alrededor de 100.000 valencianos se han desplazado a otros puntos de Europa, mientras que poco más de 60.000 lo han hecho a zonas de América. Entre Asia, África y Oceanía apenas suman 7.000 valencianos residentes en sus tierras.
Por otro lado, la Comunitat Valenciana sigue aumentando en población a pesar de que su saldo vegetativo (nacimientos menos muertes) es negativo. ¿El motivo? La llegada de personas extranjeras permite compensar el déficit de autóctonos y consolidar a la Comunitat por encima de los cinco millones de habitantes desde el año 2019 y con la previsión de alcanzar los 5,7 millones en 2037.
En este caso, el CES-CV utiliza datos del INE a cierre de 2022 para realizar este análisis. En concreto, la Comunitat recibió un total de 183.433 personas de otros países, lo que supone un 44,7% más que lo experimentado en el ejercicio anterior.
"El gran incremento ha sido el flujo procedente de Sudamérica, que ha crecido un 87,71% respecto al año 2021", señala el CES-CV en su memoria, en la que también explica que más de 8.000 de estas personas (casi un 5%) han adquirido la nacionalidad española.
En estos datos destacan Ucrania y Colombia como países con un mayor crecimiento del flujo migratorio. En el primer caso el crecimiento fue superior al 900%, debido a la guerra con Rusia iniciada en febrero de 2022. En concreto, la Comunitat recibió un total de 24.871 ucranianos, frente a los 2.471 del año anterior, antes del comienzo del conflicto bélico. En el caso de Colombia, el crecimiento del flujo fue del 184,7% en comparación con 2021.
Más de 1,7 millones de españoles cambiaron de municipio en 2022. De ellos, casi 700.000 cambiaron de provincia y unos 520.000 de autonomía. Dicho en otras palabras, poco menos de un tercio de las personas que cambiaron de localidad en dicho ejercicio lo hicieron a una situada en su provincia de origen.
Si se atiende al caso de la Comunitat Valenciana, la región recibió un total de 54.910 nuevos residentes procedentes de otras autonomías, mientras que 47.039 personas abandonaron la Comunitat con destino otras zonas de España. El saldo fue, por tanto, positivo, puesto que con estos movimientos la autonomía ganó un total de 7.871 nuevos residentes.
La memoria incluye una serie de valoraciones del Comité en algunos aspectos, entre ellos el de las migraciones. En este sentido, el CES recomienda "fortalecer las políticas de inclusión y evitar la discriminación hacia las personas migrantes extranjeras, especialmente aquellas provenientes de países extracomunitarios".
El Comité dio a conocer el pasado jueves este documento en un acto celebrado en La Nau de la Universitat de València que contó con la presencia del presidente del CES-CV, Arturo León; los vicepresidentes, Ricardo Miralles y Pilar Tarragón; así como la directora de Concoval, Nardi Alba.
En este encuentro, León resaltó que esta memoria permite "hacer una radiografía de la situación en la que se encuentra nuestra comunidad autónoma". "Creo que no hay un documento de similares características en nuestra tierra", añadió el presidente, que puso de relieve la utilidad de este informe para estudiar "cómo progresan o no" diferentes aspectos socioeconómicos de la Comunitat.
León reivindicó en su intervención que la institución pretende "ser útil" e intentar" facilitar nuestra visión plural y amplia para que se puedan tomar decisiones en línea con el sentir de la sociedad organizada". Además, destacó que el CES-CV "intenta actuar por consenso", algo "no habitual en nuestros tiempos".
"Hay que poner en valor el trabajo de la institución porque se hace con la finalidad de poder trasladar la visión integral de la sociedad organizada y que sea útil", consideró el presidente del Comité, que aseguró que la institución aspira "a una sociedad capaz de conciliar el desarrollo económico con la sostenibilidad medioambiental, a crear más y mejor empleo, a reducir desigualdades sociales, a una tierra justa y solidaria", entre otras cuestiones.