Carolina Rodríguez (Low Festival): "Alicante no tiene ni recinto ni voluntad para acoger un festival"

ALICANTE. "En estos momentos, la ciudad de Alicante no tiene un recinto para albergar un festival del tamaño del Low". Así lo sostiene la codirectora del Grupo Baltimore (que organiza festivales como el Low, Spring o Fuzzville), Carolina Rodríguez, en un encuentro con los medios de comunicación para presentar el ciclo Vibra Mahou. Además de la falta de recinto, Rodríguez duda de la voluntad política del ayuntamiento después de lo sucedido en la última edición del Spring Festival celebrada en el Puerto de Alicante. "No hay una apuesta por la Cultura; Ponen muchas trabas, y no hay las facilitades que ahora mismo encontramos en Benidorm o Elche". Rodríguez ha citado que se propuso al consistorio llevar al festival al Castillo de San Fernando y para ello, se debía cerrar su acceso durante tres semanas para los trabajos de producción, y lo rechazaron de plano con el argumento de que no se podían alterar la programación deportiva de la zona.

"En estos momentos, estamos muy cómodos en Benidorm", responde a la pregunta de si el festival volvería a la ciudad en la que nació. A ello se añade que Alicante no tiene en estos momentos un recinto donde quepan 25.000 personas al día, como la ciudad deportiva Guillermo Amor de Benidorm. Además, Rodríguez destaca que lo más importante para un festival es que te pongan facilidades estructurales desde la administración pública, algo que sucede en Benidorm, con el Low Festival, y con el Spring Festival, ahora en Elche, tras una edición el Puerto de Alicante, y donde seguirá, al parecer, en futuras ediciones.

La codirectora del festival ha puesto en valor que el Low deja entre 11 y 12 millones de euros de impacto en la ciudad y que, además, cumple con el objetivo de aportar turismo joven a la ciudad, además de su procedencia. "La inmensa mayoría del público del Low es nacional, de Madrid, Barcelona, Comunitat Valenciana, Murcia o Castilla-La Mancha", desvela. Rodríguez también ha valorado que el cambio de signo político en la Alcaldía de Benidorm nunca ha sido un impedimento para la organización del festival; a su juicio, es un tema capital para el ayuntamiento