Balastegui en una imagen de archivo. Foto: PEPE OLIVARES.BENIDORM. La tensión entre el PP y Cs de Benidorm sigue en ascenso. El último capítulo se desencadenó con una rueda de prensa convocada por la formación naranja, en la que el portavoz de la misma, Juan Balastegui, aseguraba que el gobierno local haría una serie de actuaciones que derivarían en el aumento de la factura del agua en 21.500 familias del municipio. Algo que negó en rotundo el concejal del Ciclo del Agua, José Ramón González de Zárate. En concreto, Balastegui afirmaba que la Junta de Gobierno Local había aprobado la sustitución de los contadores de agua comunitarios, por telecontadores individuales.
De este modo, aquellos edificios que tenían un contador para todos los vecinos, y por tanto, se reparten el gasto del consumo total de todos los pisos, pasarían a tener uno por casa, como ya ocurre en la mayoría de inmuebles de reciente construcción en la ciudad. En este sentido, el concejal de Cs llegaba a afirmar que la factura de estos residentes pasaría de 13 euros mensuales por agua, alcantarillado y consumo, pasarían a 30 euros sin contar el consumo: "Estamos hablando de una subida del 130% más a las familias de Benidorm".
Según argumentó Balastegui, su grupo había hecho un estudio económico de los beneficios y costes de la implantación de estos nuevos contadores digitales. Así, recordó la información que trasladó en su momento el gobierno local en el que indicaban que suponía una inversión de 2,6 millones de euros, que se sacarían del fondo de inversión, "que pagamos todos los vecinos", apostilló el edil. Por contra, afirmó que "para los vecinos no habrá ningún beneficio, solo se los llevará la empresa concesionaria, que va a ingresar 21.500 cuotas de servicio más y se va a ahorrar costes del personal que recoge la lectura en las comunidades".
Por todo ello, pedían al gobierno local que retrasara la instalación de estos nuevos contadores y en caso de no hacerlo, que se reduzca el precio de la factura del agua para compensar la supuesta subida.
Frente a todo esto, el concejal del área negó todas las afirmaciones del portavoz de Cs, explicando que solo se va a renovar los contadores actuales, por los digitales, sin añadir nuevos ni retirar la condición que tienen los edificios mencionados y manteniendo aquellos que dan servicio a una comunidad entera. A pesar, dijo, de que la normativa nacional lo exige. Asimismo, reseñó que la subida del precio del agua de 2022 la ha asumido el Ayuntamiento y no se repercutirá en la factura.
En una intervención en Radio Sirena Cope, José Ramón González de Zárate lanzó un órdago al edil de la formación naranja: dimitirá si de aquí a final de año se ha subido la factura del agua por los motivos expuestos por Cs, y en caso contrario, pidió que lo hiciera Balastegui. Una petición del concejal del PP que refleja de nuevo la tensión entre los dos partidos, que se ha visto potenciada en la última legislatura. Sin ir más lejos, hace apenas dos semanas volvieron a tener un rifirrafe público a cuenta de las quejas del Síndic de Greuges de la Generalitat Valenciana.
Con todo, el regidor popular explicó que la telelectura permite al usuario conocer y controlar en tiempo real el consumo y detectar posibles fugas de forma inmediata, evitando así sobresaltos cuando llega la factura.
