SILVERSTON (EFE). El finlandés Valtteri Bottas (Mercedes) firmó, por un suspiro, la 'pole-position' del Gran Premio de Gran Bretaña por delante de su compañero de equipo, el británico Lewis Hamilton, que en el trazado de casa vio como el monegasco Charles Leclerc (Ferrari), tercero, demostró estar en un momento dulce.
En una de las jornadas de calificación más igualadas de la temporada, el piloto finés firmó el mejor tiempo (1:25.093) en la Q3, siendo tan solo 6 milésimas más rápido que el cinco veces campeón del mundo.
Silverstone es uno de los trazados preferidos de Hamilton, que ha ganado cuatro de las últimas cinco ediciones del Gran Premio de Gran Bretaña.
Esta vez fue Bottas quien se mostró más solido en la tercera tanda de calificación, con gomas blandas. Bajo las nubes que amenazaban lluvia y una temperatura no superior a los 20º, el finlandés se destapó con el mejor tiempo en el primer intento de vuelta rápida de la Q3, momento en el que Hamilton cometió un pequeño error que lo dejó por detrás de su compañero.
En el segundo intento de vuelta rápida, el cinco veces campeón del mundo se quedó a las puertas de superar al finés, que firmó la décima 'pole' de su carrera, la cuarta de la temporada y la séptima de Mercedes, claro dominador de los sábados en lo que va de curso.
La jerarquía de la escuadra de la estrella, sin embargo, no fue apabullante. En la calificación, el Ferrari de Charles Leclerc, que llegaba de firmar la 'pole' en Austria, se quedó a tan solo 79 milésimas de Bottas.
Ya había avisado en la tercera tanda de libres el joven piloto monegasco, que en la Q2 se adelantó a los Mercedes y demostró ser muy competitivo con los neumáticos medios.
La notable actuación de Leclerc, que saldrá desde la segunda hilera de la parrilla junto a Max Verstappen (Red Bull), cuarto, contrastó con las malas sensaciones de su compañero, el alemán Sebastian Vettel.
El cuatro veces campeón del mundo acabó sexto, por detrás del Red Bull del francés Pierre Gasly y a casi 7 décimas del mejor tiempo de Bottas.
Sufrió con los neumáticos blandos Vettel, que encadena tres sesiones de calificación (Francia, Austria y Gran Bretaña) sin estar entre los tres primeros clasificados.
En Silverstone se evidenció que no solo Mercedes, sino también Red Bull y su compañero de equipo están un peldaño por encima en el ecuador de la temporada.
También se vivió emoción entre las escuderías de la zona media. Esta vez el más rápido tras los tres equipos que dominan el mundial fue el Renault de Daniel Ricciardo.
Su mejor tiempo en la calificación (1:26.182) le situó a algo más de un segundo de Bottas, un cronómetro similar al que firmó Lando Norris (McLaren), que esta vez le ganó la partida a su compañero de equipo, el español Carlos Sainz.
El británico de McLaren, que terminó a una décima de Ricciardo (séptimo), gozó de mejor ritmo que Sainz en las vueltas rápidas, superando así el corte de la Q2, lo que le permitirá salir desde la cuarta hilera de la parrilla.
La cruz de McLaren en la jornada de calificación fue el piloto madrileño. Las sensaciones de Sainz ya no fueron las mejores en la última tanda de entrenamientos libres y los peores presagios se confirmaron en la Q2, cuando no pudo pasar el corte.
El piloto madrileño -decimotercero- saldrá desde la séptima hilera de la parrilla y, si quiere puntuar, deberá recuperar el buen ritmo de carrera que mostró en la primera jornada de entrenamientos libres.
La buena noticia para el español es que este domingo podrá escoger neumáticos medios, algo que a nivel estratégico le puede beneficiar en comparación con otros rivales de la zona media.
A dos posiciones de Sainz se situó el mexicano Sergio 'Checo' Pérez (Racing Point), que esta vez pasó el corte de la Q1, pero no pudo superar el decimoquinto tiempo en la segunda tanda.
Como en el caso de Sainz, se prevé que la pugna de Pérez quede lejos de la batalla que librarán Mercedes, Ferrari y Red Bull. De momento, los pilotos de la escudería de la estrella parecen gozar de una mínima ventaja, si bien no hay que descartar al atrevido Leclerc.
En cualquier caso, la gestión de los neumáticos y la estrategia, de un mínimo de dos paradas, se prevé clave en Silverstone, la cuna de la Fórmula Uno, donde Hamilton intentará sumar la sexta victoria en el trazado de casa.