BENIDORM. Eduardo Zaplana vive a caballo entre Benidorm, València y Madrid desde que dejó la política. Los que le conocen en Benidorm, indican que sus apariciones públicas en la ciudad se redujeron los últimos años a algunos actos por las Fiestas Mayores Patronales. Es ahí donde, a pesar de su enfermedad, se veía al que fuera alcalde del municipio en la ofrenda a la Virgen del Sufragio, e incluso aguantando hasta el pregón de las fiestas.
Uno de los últimos pregones lo llegó a dar él en 2011, cuando de alcalde estaba el socialista Agustín Navarro. El ex jefe del Consell tenía gran arraigo por las fiestas patronales de la ciudad que le vio nacer políticamente. Es más, van a la par.
En 1991, cuando accede a la alcaldía de Benidorm, funda su peña con amigos: "El Picarol". Que aguantó hasta casi 20 años, cuando se disolvió por los enfrentamientos entre las dos facciones del PP local, que además integraban esta peña.
Tras esto, Zaplana no dejó de asistir a las fiestas de Benidorm, pero ya en un segundo plano, para reunirse con sus amigos de siempre. Unas reuniones que llevaba en la intimidad en los últimos años del ex presidente de la Generalitat.
Quienes le conocen aseguran que seguía haciendo vida en la ciudad, pero de una forma más apartada. Hay que tener en cuenta que su chalet en Benidorm está apartado del bullicio que significa una ciudad de las características de la capital turística de la Costa Blanca. Hay quienes lo veían pasear muy de vez en cuando por el barrio.
Su vinculación a la localidad además es importante debido a la familia política que le sigue uniendo a Benidorm. Es más, la última vez que se tiene constancia en los medios en la zona es en el funeral de su suegro, Miguel Barceló, fallecido en marzo de este año.
Más allá de los actos festeros, pocas actos públicos en Benidorm frecuenta. La última constancia es de una comida de ex alcaldes, invitado por Navarro, junto a Rafael Ferrer Meliá (1978-1979), Jaime Barceló Pérez (1966-1971) y Miguel Pérez Devesa. Ese mismo año, el Ayuntamiento de Benidorm concedió la Medalla Corporativa de la ciudad a los exministros Eduardo Zaplana y Leire Pajín.
En 2014, se dejó fotografiar en las fiestas de Navidad por el centro de Benidorm junto a la ex popular y líder de Liberales, Gema Amor.
La detención de Zaplana no cogió por sorpresa a Benidorm. El alcalde, Toni Pérez, hizo declaraciones respecto de la detención momentos después de la misma, que consideró "un mazazo" tanto para él personalmente como para la ciudad. Preguntado por el arresto del que fuera alcalde benidormí entre 1991 y 1995 por un presunto delito de blanqueo de capitales, desvío de fondos y malversación de caudales, Pérez ha repetido que ha sentido "un mazazo" y "dolor" porque Zaplana "fue un referente en la gestión municipal y autonómica" y porque se trata de una noticia negativa para "esta tierra".