BENIDORM. El Ayuntamiento de Benidorm lleva más de un año funcionando sin sus tres habilitados nacionales: interventor, secretario municipal y tesorero. Pero eso no es todo, en los últimos días también se ha conocido la jubilación de una pieza clave para el funcionamiento del Consistorio: el arquitecto municipal José Luis Camarasa. Una nueva baja que atañe directamente a una de las áreas principales de la administración local por su importancia a la hora de llevar a cabo diferentes proyectos en la ciudad.
El municipio vive en una constante evolución, y de ello ha sido testigo y artífice el propio arquitecto municipal, que lleva vinculado a la localidad desde hace cuatro décadas. Ha firmado diferentes proyectos en Benidorm, como es el propio edificio consistorial. O incluso el mobiliario urbano, como el lavapiés multiusuario de la Playa de Levante. Y debido a este cambio permanente también hay un trabajo detrás en el área de Arquitectura que ahora se queda sin una de sus figuras. La edil de Recursos Humanos, Ana Soliveres, explicó a este diario que están estudiando si habrá novedades en la plantilla.
De este modo, el Ayuntamiento sigue afrontando cambios en los puestos relevantes de la administración local. Como se decía, sigue a la espera de poder cubrir los puestos de los tres habilitados nacionales, cuyo trabajo están desempeñando funcionarios de cada área de manera accidental y provisional. Una espera que parece que empieza a acortarse.
El Consistorio pide cubrir las plazas, pero depende de las convocatorias oficiales que lanza el Ministerio de Hacienda y Función Pública. Y no ha sido hasta este 16 de enero cuando el Boletín Oficial del Estado ha emitido la citación. Con todo, se estima que estos altos funcionarios no lleguen al Ayuntamiento hasta la segunda mitad de año.
Al margen de lo ya mencionado, el municipio ha convocado las pruebas selectivas para la provisión en propiedad de once plazas de conserje municipal, como personal laboral fijo, que estarán reservadas en su totalidad a personas con diversidad funcional. Se realizará mediante el sistema de oposición por turno libre. Las bases de la convocatoria, aprobadas el 2 de enero por la Junta de Gobierno Local, se publicaron el pasado 30 de enero en el Boletín Oficial de la Provincia de Alicante (BOP), con un plazo de 20 días hábiles a partir del día siguiente a su publicación para la presentación de instancias.
Además de cubrir las vacantes de conserje existentes en edificios e instalaciones municipales, este proceso selectivo va a permitir crear una bolsa de empleo con las personas que hayan superado las pruebas selectivas pero no obtengan plaza, “con lo que a partir de ahora también tendremos un recurso para poder incorporar personal ágilmente a la plantilla con carácter temporal cuando haya una vacante o se produzca cualquier tipo de eventualidad”, según la edil de Recursos Humanos.
Podrá optar a estas once plazas cualquier persona mayor de 16 años que no haya alcanzado la edad de jubilación, que no haya sido apartada o inhabilitada previamente para la función pública y que, además, posea las capacidades y aptitudes físicas y psíquicas que sean necesarias para el desempeño de las correspondientes funciones o tareas del puesto y tenga reconocido un grado de diversidad funcional igual o superior al 33%.