BENIDORM. El Ayuntamiento de Benidorm apuesta por la empresa murciana Neosistec para implantar una tecnología parecida a los conocidos códigos QR en el Casco Antiguo. Este sistema de marcadores, desarrollado junto a la Universidad de Alicante, introduce ventajas como un mayor alcance, no necesita enfoque para activar la respuesta y permite al viandante estar en movimiento. El objetivo es ganar en accesibilidad en la ciudad, ya que sirve también de guía para personas con discapacidad visual.
Para ello, el Consistorio ha anunciado que pedirá una subvención en la convocatoria para el presente ejercicio para entidades locales en pro de la mejora de las condiciones de accesibilidad al medio físico que convoca la Vicepresidencia y la Consellería de Igualdad y Políticas Inclusivas de la Generalitat Valencia. El importe solicitado es de 19.946,85 euros, “lo que supone el 50% del presupuesto total para la implantación de navilens en el Casco Antiguo del municipio de Benidorm y que asciende a 39.893’70 euros”, según indicó el alcalde de Benidorm, Toni Pérez.
¿Cómo funciona? Se trata de una imagen, un cuadrado de colores, que se coloca en sitios estratégicos de la calle para que el transeúnte enfoque con la cámara de su móvil al mismo. El teléfono a continuación dará la información que previamente haya documentado el Consistorio. Eso sí, tendrá que tener instalada la aplicación gratuita de la empresa para que pueda funcionar.
Según adelantó el primer edil, en principio prevén que detecte la localización y señale la dirección. De momento, el proyecto está planteado para que se incluya en las calles del Casco Antiguo de la ciudad, "que es una zona de plataforma única y mapeada, para que se facilite la ubicación y la orientación en el trayecto por el mismo”. Pero no descartan que en un futuro se amplíe con audioguías o información sobre historia, patrimonio y aspectos turísticos.
El alcalde consideró esta tecnología como una evolución de los QR, que en su momento, también se colocaron placas por el municipio que se enlazaban a la web de la Concejalía de Cultura para hacer más accesible la información sobre puntos de interés. Sin embargo, no ha sido hasta la pandemia cuando este servicio se ha puesto más de moda para evitar, por ejemplo, tocar la carta de un restaurante y así leerla directamente en el smartphone escaneando el código que facilita el establecimiento.
Los 'NaviLens' ya se utilizan en el envoltorio de una multinacional de cereales de alimentación. Además, la Autoridad Metropolitana de Transportes de Nueva York en sus sistema de paradas de autobús y estaciones de metro también lo han implantado. Pero también en España, en ciudadanos como Murcia, Madrid, Barcelona o Córdoba.
Pérez destacó que “se trata de tecnología nacional con implicación de la Universidad de Alicante”, señalando “la sencillez de uso” así como el gran abanico de posibilidades que Benidorm inaugura con los códigos navilens por su aplicabilidad, “gracias a su facilidad de captación de los códigos y su aplicabilidad también en museos, exposiciones y otras actividades”. Para el alcalde de Benidorm, “la facilidad de reportar información, vía audio y en el idioma del receptor será determinante para ampliar el abanico de posibilidades y reportar para Benidorm una más alta conceptuación en el nivel de Destino Turístico Inteligente más seguro, sostenible e innovador”.
El uso más extendido ahora será para dar indicaciones de izquierda, derecha, delante, arriba, etcétera, para orientar al usuario sobre su situación. Además, informa de la distancia a la que se encuentra la siguiente etiqueta y los pasos que debe realizar. Para encontrar la primera etiqueta basta con dar un giro de 160 grados para dar con la etiqueta más cercana cuando entra en un lugar, cuando está pensado en museos o estaciones, por ejemplo.
Al introducir otras informaciones, como pueden ser históricas sobre un monumento o sitio de interés, también podrá ser útil para personas sin discapacidad visual.
