BIGASTRO. La todavía presidenta del Consorcio de Basuras de la Vega Baja, Teresa Belmonte, se ha defendido hoy de las críticas por “inacción” que han acabado con una “moción de censura” por parte de 15 municipios de la comarca para revocar su presidencia y dársela al alcalde de Dolores, el socialista José Joaquín Hernández. Dos días después del anuncio de esta solicitud de pleno extraordinario para echarla de su cargo, Belmonte, también alcaldesa de Bigastro, ha comparecido apoyada por varios alcaldes populares de la Vega Baja para defender su gestión, negar la parálisis del organismo y pedir tanto a la Diputación como a la Generalitat que se abstengan en la votación que, previsiblemente, otorgará la presidencia a Hernández “para que seamos los ayuntamientos de la Comarca los que decidamos”. En el anuncio del pleno extraordinario el martes para pedir la revocación de Belmonte, Hernández aseguró que contaba con el apoyo de la Generalitat para asumir él la presidencia.
Belmonte ha comenzado su intervención asegurando que “no puedo consentir que se ponga en duda el trabajo que se ha hecho por parte, sobre todo, de los técnicos” y ha recordado que el hecho de que no se haya puesto en marcha la planta de transferencia de Dolores se debe a razones ajenas a la voluntad y al trabajo por parte de la presidencia del Consorcio. “Hace más de un año tuvimos conocimiento de la firmeza de la sentencia” que obliga a respetar la concesión que se realizó “hace más de diez años, por lo que adaptar a la legislación actual ese contrato no es fácil y requiere de mucha cautela. Cada céntimo que se consiga negociar es una ventaja para los vecinos de la comarca”. Para poner en valor la gestión ha señalado que “en estos tres años hemos construido la planta de Tranferencia de Dolores, que recordemos que la empresa dio con seis meses de retraso. No dispone de la licencia de actividad que tiene que otorgar el Ayuntamiento de Dolores. La licencia está en sede judicial porque ha habido errores. A día de hoy están revisando la planta los técnicos municipales y de Vaersa. Justo ahora, qué casualidad”. Por tanto, Belmonte ha apuntado a la Generalitat y al Ayuntamiento de Dolores como responsables de que la planta de transferencia siga cerrada: “a ellos corresponden los trámites administrativos para ponerla en marcha. ¿De quién es la inacción entonces?”.
Belmonte ha advertido además de que en caso de que se ponga en marcha a través de la empresa pública Vaersa “hay que llevar cuidado pueden acabar pagando indemnizaciones” por no respetar la sentencia que obliga a que la adjudicataria original retome el contrato”, aunque Vaersa preste el servicio de forma transitoria. La alcaldesa de Bigastro también ha acusado a Hernández de mirar por su propio beneficio pues “parece que lo único que le importa son los 240.000 euros que el Ayuntamiento de Dolores va a ingresar cada año cuando se abra la planta de transferencia”. En la misma línea también ha criticado al PSOE comarcal, y ha dejado ver que esta revocación “tiene un poco que ver con la moción de censura en Orihuela. Estaban desando llevarla a cabo para tomar el control del Consorcio”.
En cuanto a la fecha en la que convocará el Pleno extraordinario para pedir ese cambio de presidencia, Belmonte ha señalado que se convocará mañana y, partir de ahí, deberán pasar los 15 días que marca la ley.