VALÈNCIA. Banco Sabadell (SAB) se ha quitado un problema de encima llamado Samlyn Capital, su bajista de cabecera desde que aterrizara en el capital de la entidad el 2 de octubre del pasado año. Tal y como lo ha comprobado este diario de la base de datos pública de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), no hay ni rastro ni de este hedge fund o fondo de alto riesgo ni de ningún 'corto' con DNI. De haberlo ninguno tiene el mínimo legal del 0,50% a partir hay que desvelar el nombre ante el mercado. La semana pasada este diario ya publicó que dicho bajista estaba en retirada. Entonces sus posiciones cortas se habían reducido hasta el 0,59% en lo que era su cuarta bajada consecutiva desde el 0,90% del 10 de junio del año en curso.
Mientras Samlyn Capital ha plegado velas, Norges Bank, que gestiona el mayor fondo soberano del planeta como es el noruego, acaba de elevar su participación -no 'corta'- en el SAB hasta el 3%. Así lo ha constatado también Valencia Plaza de la web del organismo supervisor, que lo convierten en accionista de referencia. De este modo vuelve a situarse en dicho nivel después de que lo perdiera el pasado 29 de abril. Los nórdicos llegaron a tener en cartera el 3,395% a mediados de enero de este año, que fue la mayor que nunca han tenido desde que se dejasen ver allá por mayo de 2018.
Un SAB que ayer martes puso fin a una racha alcista de cinco sesiones -y con solo dos bajadas en las últimas diez-, al ceder un 1,96% y cerrar en los 0,701 euros, que por otro lado fueron los mínimos del día. Una caída en un día de marcado carácter bajista en bolsa ante la fuerte subida del precio del petróleo, que añade más presión inflacionistas y pasó factura sobre las bolsas. El Ibex 35 sufrió un duro correctivo del 2,6%, pasando de superar los 9.000 puntos en la apertura a cerrar en los 8.769 puntos.
Sin embargo, y pese a la corrección del SAB, se mantiene como el valor que mejor se comporta este año no solo en el Ibex 35 sino en todo el Mercado Continuo español donde conviven 130 valores. El banco dirigido por César González-Bueno, que en diciembre cumplirá su primer año como CEO, prácticamente duplica su valor (+98,02%), lo que se traduce en una capitalización de casi 3.944 millones de euros. Y no solo eso sino que el buen tono de la entidad ha venido acompañado por un incremento de su contratación, cuya media diaria anual va camino de los 34 millones de euros, según datos de Infobolsa.
"A nivel técnico, la franja crítica de precios que llegó a alcanzarse en el mes de mayo del presente ejercicio (0,6840 euros) ha sido superada, alcanzando niveles no observados desde marzo de 2020. De conseguir mantenerse este valor, la cota de crecimiento podría conducir al siguiente precio objetivo en 0,80 euros. Todo ello pese a las señales de sobrecompra del RSI, que están notablemente por encima del nivel 70". Son palabras de Miguel Momobela de XTB, que ayer analizaba para los lectores de este diario al Banco Sabadell, advirtiendo que está dando señales de sobrecompra.
Mientras tanto el banco domiciliado en Alicante, que publicará sus resultados de los nueve primeros meses el 22 de octubre, está estudiando una reducción del número de afectados por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que ha planteado para 1.936 empleados con el fin de facilitar la voluntariedad de las salidas, según confirmaron a Europa Press fuentes sindicales presentes en la reunión de ayer martes. Tras valorar esta opción, el banco hará una propuesta en la reunión de mañana 30 de septiembre.
Durante el encuentro, los representantes de los trabajadores han puesto de manifiesto que, si el SAB rebaja "de forma considerable" la cifra de afectación y ofrece unas condiciones económicas de salida "atractivas" para prejubilaciones y bajas incentivadas, será posible que la adhesión al ERE sea voluntaria. Los sindicatos aseguraron que, una vez que se rebaje la cifra inicial de afectados, analizarán de qué forma pueden desarrollar un propuesta para que todas las salidas sean voluntarias.
SAB justifica el nuevo ERE, que sucede al que acometió hace casi un año, en la necesidad de seguir siendo competitivo y garantizar su sostenibilidad, lo que requiere de una reducción del desequilibrio funcional y geográfico en el perímetro identificado. En este sentido ha trasladado de nuevo a los sindicatos que seguirá esforzándose para llegar al mejor acuerdo para los trabajadores y para la entidad; además de plantear un plan social que garantice el acompañamiento y la recolocación del 100% de las salidas por encima de los estándares del mercado.