Panorámica de la playa de vías todavía en superficie en el acceso ferroviario a Alicante. Foto: RAFA MOLINA ALICANTE. La futura estación intermodal de Alicante comienza a existir sobre planos. La sociedad Avant, compuesta por el Gobierno Central (50%), la Generalitat (25%) y el Ayuntamiento de Alicante (25%), dispone ya del estudio de alternativas contratado a finales de 2021 con el propósito de dar encaje a la construcción de ese nodo concebido como intercambiador de transportes, capaz de conectar los servicios de ferrocarril, de tranvía y los autobuses interurbanos en un mismo espacio.
Ese estudio, puesto a disposición de Avant en el mes de noviembre, define tres opciones distintas para situar y distribuir la nueva terminal -el mínimo que se establecía en el concurso por el que se concertó su redacción, hasta un máximo de cinco- que ahora están siendo objeto de revisión por parte de los técnicos de Avant y de la Concejalía de Urbanismo. De ahí que todavía no haya trascendido el contenido de cada una de esas tres propuestas, en la medida en que podrían quedar sujetas a posibles modificaciones.
En todo caso, los tres diseños de ubicación planteados por el equipo redactor al que se le encomendó los trabajos (la UTE compuesta por los gabinetes de arquitectura de Peñín Arquitectos S.L.P. y Emilio Vicedo Ortiz, que habría contado con la colaboración del arquitecto Manuel Lillo y del ingeniero de Caminos Mauricio Úbeda Muller) certifican que el ámbito de influencia de la actual estación de Renfe, con una superficie aproximada de 130.000 metros cuadrados, ofrece las condiciones necesarias para albergar la construcción de la nueva infraestructura, lo que disiparía las dudas técnicas que se había albergado por parte de Adif, ante la confluencia de
Todo, teniendo en cuenta tres circunstancias determinantes: el diseño de la nueva terminal específica para el ferrocarril, la conservación de su edificio histórico actual, la provisión de un espacio para ubicar la terminal de autobuses y el encaje de parte de las viviendas previstas en el conjunto de los terrenos del acceso ferroviario a Alicante, la denominada Operación Integrada Número 2 (OI/2), con cuya comercialización posterior se pretende contribuir a financiar el importe de las obras de todo el sector.
Y ello, además, garantizando la permeabilidad peatonal entre los barrios históricamente separados por las vías del ferrocarril: San Blas, Ciudad de Asís y La Florida. Ese era, de hecho, otro de los requisitos esenciales del concurso sobre la redacción del estudio al que también se daría cumplimiento, lo que despejaría la reserva de 156.000 metros cuadrados de suelo para el desarrollo del denominado Parque Central en continuidad, prácticamente desde las inmediaciones de la avenida de Salamanca, en el momento en el que se complete el soterramiento de la playa de vías que todavía discurren en superficie en la llegada del ferrocarril hasta la terminal, en función de la propuesta de ordenación estructural diseñada para la OI/2, ya aprobada de forma provisional por el pleno del Ayuntamiento.
Lo cierto es que ese estudio de alternativas ya ha comenzado a generar efectos concretos. Entre ellos, como elemento clave en la negociación entablada con Adif respecto a la cesión de los terrenos necesarios para la construcción de la nueva estación del tranvía en Renfe, en el espacio ocupado actualmente por el aparcamiento de vehículos en superficie anexo a la terminal, que -precisamente- quedará integrada en el nodo intermodal.
Fuentes consultadas precisaron que la exposición de las posibilidades previstas en ese estudio de alternativas sobre el intercambiador de transportes fue el elemento que terminó de desbloquear posibles reticencias sobre la puesta a disposición de la Generalitat de ese suelo, en el encuentro entre representantes de Adif, de la Generalitat y del Ayuntamiento celebrado el pasado 14 de diciembre.
Según las mismas fuentes, en esa reunión se planteó que en esas tres opciones de encaje para la intermodal se facilitan soluciones para el traslado de infraestructuras y servicios propiedad de Adif que resultan imprescindibles para el funcionamiento de las distintas conexiones de ferrocarril implantadas en Alicante. Entre esos equipamientos, figuraría un centro de transformación, así como instalaciones específicas para la reparación de averías.
De hecho, en el encuentro a tres bandas también se planteó que ese estudio de alternativas debería dar alas para que se iniciase la redacción del proyecto de la estación intermodal propiamente dicha, en el momento en el que los responsables de Adif concreten qué modelo de estación plantean para la ciudad de Alicante y cuáles serían sus parámetros básicos.
Por el momento, en la propuesta de ordenación estructural de la OI/2 aprobada por el Ayuntamiento, se contempla una reserva de 22.000 metros cuadrados para su construcción, en la que no podría tener encaje la incorporación de un centro comercial al uso (aunque sí tiendas y locales hosteleros puntuales para dar servicio a los viajeros). No obstante, esa definición queda pendiente ahora de la redacción del planeamiento que concrete su ordenación pormenorizada.
