Atiende Alicante sigue erigiéndose como oasis musical: la carta de presentación, el mestizaje de Y La Bamba

ALICANTE. Un año más, Atiende Alicante no falla a su cita para el reducto que cada curso espera con ganas la propuesta nueva que este ciclo de conciertos lleva ofreciendo desde 2014 con un sello de calidad que lo distingue. Esta vez, concentrado en tres días, pero con los mismos factores de siempre, un cartel heterogéneo, singular, que combina artistas internacionales difíciles de ver por estos lares, con grupos locales, que para algo se hace en la terreta. En definitiva, otro cartel con el que derramar la baba, ya que el oasis musical de Atiende Alicante muestra que las cosas se pueden hacer de otra forma, y que hay un público que consume y aprecia propuestas más arriesgadas, por reducido que sea. 

El próximo mes de septiembre arranca la séptima edición por todo lo alto, precisamente con una de esas artistas marca de la casa, la estadounidense Luz Elena Mendoza con su atractivo proyecto Y La Bamba, un cruce entre la música latina, el indie y el folk. Una interesantísima propuesta de mestizaje que lleva una década facturando bellos y delicados discos y que hasta ahora apenas había pisado España, y aprovechando la gira, pasará por Stereo Alicante un día después de hacer lo propio en Madrid. Se trata sin duda de una de esas apuestas que distinguen a Atiende Alicante y que hacen de este ciclo una cita ineludible para gente ávida de experiencias sonoras diferentes. Estará presentando Mujeres (Tender Loving Empire, 2019), un trabajo más fuerte, bailongo y latino; de empoderamiento, del que viendo cómo se titula se ve la temática que ha escogido la cantautora. 

Precisamente que este año haya más mujeres protagonistas en el ciclo es la principal novedad de Atiende Alicante, como explica Miguel Carratalá, uno de los sospechosos habituales de la escena musical de la provincia, y que suele ser uno de los impulsores de este y otros fregaos. En ese sentido, Carratalá apunta que se han inscrito en el proyecto Juno a la Tardor —un ciclo para fomentar a las mujeres creadoras de arte que se ha extendido a todo el territorio valenciano—: "todo el arte ha estado copado y ocupado por hombres, y en la música igual". Aclara —por si alguien lo necesita a estas alturas del partido— que no se hacen favoritismos, "sino dar a conocer que también existen mujeres artistas haciendo cosas muy interesantes. Y nos parecía oportuno apoyarlo". Ese mismo día 20, junto a Y La Bamba, estarán también Trepàt, formación independiente granadina que va a por su tercer disco, y cómo no, Los Manises, el dúo ilicitano que cada vez tiene más presencia en diferentes propuestas por todo el país. Otros sospechosos habituales que cumplirán la cuota de la casa. 

El sello heterogéneo y singular de siempre

El resto de las actuaciones tendrán lugar en el Teatro Arniches. La primera de ellas será la de Pongo —conocida por haber formado parte de Buraka Som Sistema— el 13 de octubre, la propuesta más moderna con su trap angoleño. "Es bastante cañero, no sé cómo va a responder el teatro Arniches", comenta entre risas Carratalá, aunque especifica que vienen en formato trío. Así que se espera un espectáculo menos hardcore, que en otros formatos como cuando va sólo en modo Dj y Mc. Así pues, habrá que ver cómo responde el personal ante Pongo, ya que algunos eran reticentes a las actuaciones en el Arniches, un escenario más serio y poco habitual de conciertos. Pero como bien dice Carratalá, "la música cabe en cualquier y en el teatro nadie te dice que no puedas bailar". Es paradójico de hecho que sea ella y no Y La Bamba la que actúe en el Arniches. En cualquier caso, en octubre se verán las reacciones.

Por último, cerrará el ciclo el 1 de noviembre Dorian Wood, una artista mayúscula que ya es casi una tradición en la zona. Estuvo en L'Escorxador ilicitano en 2017 y en abril de este año, justamente con el espectáculo que presentará en Alicante: 'Xavela Lux Aeterna'. Un excelente y sorprendente homenaje a la mexicana de origen costarricense —como Wood— Chavela Vargas. Un tratamiento exquisito de sus clásicos, con todos los detalles y con una puesta en escena imponente, por toda la instrumentación, el espacio que ocupa Wood artísticamente y su juego con el cuerpo —algo que también ejecuta y estudia Niño de Elche—, siendo una propuesta integral. 

Un Dorian Wood que además abrió el primer ciclo de Atiende Alicante allá por 2014 —junto a insignes como Pere Ubu o el pionero Silver Apples— cuando aún era un perfecto desconocido. Eso sí, ya metió entonces a 120 personas en el teatro, aunque "ahora ya tiene un nombre en España y un caché", asevera el miembro organizador. Al contrario que Y La Bamba por ejemplo, que al pisar el terreno por primera vez, llega como Wood en 2014, con mayor modestia. "Es gente coherente", apunta Carratalá, quien no oculta que "Dorian Wood representa el rollo del Atiende, sin un género claro. Inquieta, sin una estética más definida", señala. 

Así pues, el último cuatrimestre de este año presenta la siempre suculenta programación de Atiende Alicante, un ciclo que cuenta con alguna ayuda de Cultura del Ayuntamiento y que recibe también el apoyo del Arniches desde la Generalitat, con una colaboración que se traduce en la cesión del espacio. "Una ayuda imprescindible", relata Carratalá, "porque las primeras las hicimos nosotros a pulmón". Se trata obviamente de "propuestas arriesgadas que no conoce todo el mundo y que necesitan apoyo, sea bolsillo público o privado". En cualquier caso, asevera que "lo haces por gusto al arte". Es decir, que si no existieran estas ayudas, ya se encargarían de buscar las castañas por otra parte, como hacían con las primeras ediciones del Transtropicalia. Al final, como ocurre con estos ciclos cuando se estabilizan y ya se transforma en una cita obligatoria, logra un público fiel. "El año pasado con Mammane Sani, entraron casi 100 personas en el Arniches siendo un desconocido. Inconcebible hace 5 años", concluye Carratalá.

Así pues, como se suele decir, Atiende Alicante; si no existiera, habría que inventarlo.