ALICANTE. Pese a la pérdida de escaños, el 28A ha dejado un poso de optimismo en Unidas Podemos. Ahora, con menos representantes, se ven más decisivos que antes. Dicen sus dirigentes que lo han sido para evitar un acuerdo entre las tres fuerzas de derechas, PP, Cs y Vox, y que lo pueden seguir siendo el próximo 26M en los gobiernos locales. Y sobre todo, en Alicante, donde las encuestas, como la de Alicante Plaza, les otorga 5 concejales y una mayoría consolidada para que la izquierda pueda retomar el Gobierno de la ciudad, como ocurriera en 2015.
Los actos de Podemos suelen ser variados. Intervienen mucha gente. Ya ocurrió en Elche con Irene Montero, y se ha vuelto a repetir este viernes, en la ciudad de Alicante. Pero de todos los que han intervenido, destacaron dos intervenciones, a nivel local, el alcaldable, Xavi López y el candidato Dani Simón, y una en el ámbito nacional, la portavoz adjunta Ione Belarra: y todas ellas, con un mismo denominador común. Exhiben la trasversalidad que quiere mostrar la confluencia, más alejada de los discursos primigenios -aquello de la casta- y más ortodoxos, aunque Alberto Garzón se situó más en esa línea, en el cierre del acto.
Dani Simón se presentó como un agitador, un agitador que intenta motivar a los colectivos a los que se dirige la confluencia para que el cambio política sea eficaz. Arengó a los presentes con el "Sí se puede" con una concatenación de movimientos sociales y políticos que sí han conseguido sus metas. Pero se centró en la cultura: hizo una defensa del proyecto de Cigarreras, como elemento de unión intergeneracional de barrios, y del propio sector cultural creador como un elemento dinámico para la economía. "Puede ayudar a desestacionalizar el turismo de esta ciudad", ha defendido.
Xavi López ha aprovechado el acto central de campaña para desgranar las grandes líneas de su programa electoral. El alcaldable de Unides Podemos ha prometido un plan de bucodental para los vecinos de Alicante, una oficina antidesahucios; un plan de movilidad que fomente el uso de la bicicleta como medio de transporte, transporte público con conexión a los polígonos industriales o un impulso a la energía fotovoltaica. Se detuvo en los barrios, y dijo que si es alcalde, intentará que los barrios sean más amables e inclusivos, que doten de servicios para todas las fases de la vida y que sus plazas tengas fuentes y aseos públicos para evitar tener que entrar un bar a pedir su uso a cambio de una consumición. López, al igual que lo había hecho con anterioridad Vanesa Romero, la número dos, anunció un nuevo Plan General de Ordenación Urbana, que supere al de 1987, que "cuente con la participación de todos los sectores sociales y que no haya nadie que lo pinte de rotulador en función de sus intereses económicos, como ocurría con Sonia Castedo".
Por último, el alcaldable morado apeló a la movilización del electorado para no sólo parar a las tres derechas, sino que "también para que el PSOE no tenga la tentación de pactar con Ciudadanos".