El Ayuntamiento de Orihuela ha sacado a licitación el contrato para el servicio integral de desinfección y control de plagas en el término municipal y sus pedanías. El pliego establece que la empresa adjudicataria deberá encargarse durante un periodo de tres años —prorrogables por dos anualidades más— de las labores de desratización, desinsectación, desinfección y control de aves, con especial atención a las poblaciones de palomas asilvestradas.

El ámbito de actuación será amplio e incluirá centros escolares, dependencias e instalaciones municipales, polideportivos, la red de alcantarillado con más de 11.000 pozos, así como parques y solares de titularidad pública. También se contempla la intervención en locales privados cuando exista orden judicial o requerimiento de los Servicios Sociales.

El pliego detalla actuaciones trimestrales en la red de alcantarillado, alumbrado, semáforos y pluviales, además de tratamientos preventivos en superficie contra roedores en espacios ajardinados, plazas y zonas residenciales. Entre las especies a controlar figuran ratas, ratones y cucarachas, pero también pulgas, garrapatas y hormigas, además de avispas y abejas en situaciones de riesgo para la seguridad pública, siempre priorizando la retirada de panales mediante apicultores registrados.

El contrato prevé además campañas informativas y educativas para la población, así como un sistema de respuesta a denuncias ciudadanas que deberá atenderse en un máximo de 48 horas. La empresa adjudicataria estará obligada a presentar partes semanales de los trabajos realizados y un informe anual a la Concejalía de Sanidad.

En el caso de las palomas, el pliego autoriza el uso de cañones de red y jaulas trampa en al menos seis puntos del casco urbano y en pedanías, con la obligación de respetar la normativa de bienestar animal.

El adjudicatario deberá contar con personal especializado y registrado, disponer de un plan de prevención de riesgos laborales y suscribir un seguro de responsabilidad civil de al menos un millón de euros. En caso de incumplimiento, se contemplan sanciones que van desde faltas leves hasta la rescisión del contrato por infracciones muy graves.