ORIHUELA. La asociación Amig@s de Sierra Escalona (ASE) celebra este mes sus dos décadas de trabajo colectivo con una publicación que recoge su trayectoria en la defensa, estudio y divulgación de este paraje natural, al tiempo que redobla su exigencia para que la Generalitat apruebe de manera definitiva el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) y convierta la zona en Parque Natural antes de que finalice la actual legislatura.
El libro, titulado “Que 20 años no es nada… y ha sido mucho”, ha sido coordinado por el vocal de ASE Tomás Vicente Martínez y reúne más de una veintena de textos elaborados por miembros de la asociación y expertos de reconocido prestigio. Entre ellos figuran el biólogo Miguel Delibes de Castro, profesor ad honorem del CSIC; el periodista ambiental José Antonio Montero, redactor jefe de Quercus; y el catedrático de la Universidad de Alicante José Fernando Vera Rebollo. La obra supera las 170 páginas y pretende no solo repasar el camino recorrido desde 2005, cuando la entidad se constituyó en San Miguel de Salinas, sino también proyectar su compromiso hacia el futuro.
La primera presentación tendrá lugar el viernes 28 de noviembre, a las 19 horas, en el local de la Asociación de Vecin@s San Miguel Arcángel, en San Miguel de Salinas. ASE ha programado además dos presentaciones adicionales en Torremendo (Orihuela) y Pilar de la Horadada antes de que termine el año. La entidad hará llegar asimismo ejemplares a los centros educativos públicos de secundaria, bibliotecas municipales y ayuntamientos de los tres municipios vinculados a la sierra, así como a la Generalitat Valenciana.
La asociación subraya que la protección de Sierra Escalona y la Dehesa de Campoamor como Parque Natural supondría la creación del décimo espacio natural protegido de la provincia de Alicante y el segundo en la Vega Baja. Pero para ello es imprescindible aprobar el PORN, cuya tramitación se inició en 2019 y cuya Declaración Ambiental y Territorial Estratégica (DATE) fue emitida en abril de este año. ASE reclama que este paso final llegue “a la mayor brevedad posible”.
Tras veinte años de reivindicaciones y trabajo voluntario, la entidad conservacionista considera que la publicación es un homenaje a la movilización ciudadana que ha acompañado a Sierra Escalona, pero también un recordatorio de que su protección definitiva sigue siendo una asignatura pendiente.