Las últimas riadas coincidieron con la celebración de la fiesta autonómica del 9 d'Octubre y hubo que suspender la Procesión Cívica en València a la que iba a asistir el jefe del Consell Carlos Mazón: me imagino la cara de alivio que se le tuvo que poner puesto que ya se había gestado un movidón, promovido abiertamente por PSPV-PSOE en compañía de otros (los de siempre). Iban a reventar el acto pero las fuertes lluvias registradas ese día hicieron la faena por ellos. Se les aguó la fiesta nunca mejor dicho.

El reventón, más que previsible, se va a producir el próximo 29 de octubre fecha en la que se cumple un año de la Gran Riada y (hasta ahora) 229 de muertos, fecha en la que se va a celebrar un Funeral de Estado en el Palacio de las Artes y las Ciencias.  El acto, organizado por el Gobierno de la nación, será una nueva encerrona para Mazón a su entrada en el recinto. Ya han empezado las voces disidentes como la de Rosa Álvarez, presidenta de la Asociación de Víctimas Mortales de la Dana quien ha reclamado a la subdelegada del Gobierno, Pilar Bernabé, que no se invite al presidente de la Generalitat o, en última instancia, que éste último alegue enfermedad  repentina o ausencia por informe psicológico.

Mazón tiene que estar en el Funeral de Estado: lo contrario sería una anomalía democrática de tomo y lomo. La misma anomalía que se produjo hace un mes cuando el ministro de Transportes, Óscar Puentes, el vocero de mala leche del Gobierno de Pedro Sánchez, excluyó a Mazón de un acto en el aeropuerto Alicante/Elche en el que se anunciaron las nuevas inversiones de Aena. Y de paso, excluyeron también al presidente de la Diputación, Toni Pérez, que a su vez es alcalde de la capital turística de la Comunitat Valenciana, Benidorm. Toda una grosería que no es más que un síntoma del estado de corrupción democrática al que hemos llegado. Corrupción, sí. Otros analistas, en su pleno derecho están, se centran en la repercusión electoral de la Dana y en las pretensiones (quiméricas) sobre si Mazón aspira a repetir como candidato del PP. A mí eso me produce relativa indiferencia, todos los días a vueltas con las encuestas. Me preocupa, ya lo saben mis estimados lectores, el subidón de la ultraderecha: aquí y en toda España. La conciencia del jefe del Consell la tiene que gestionar él y sólo el. Y la Justicia, llegado el caso.

Me parece un gesto casi heroico que el alcalde de Muro de Alcoy, Vicent Molina (Compromís), haya aceptado acoger menores no acompañados en un municipio de casi 10.000 habitantes. Ya hay una veintena alojados en el Albergue Juvenil Sierra de Mariola y las previsiones son de llegar a los 60. Molina ha argumentado que eso será positivo para el mercado laboral además del fomento de la solidaridad. Bien. En este caso Compromís predica con el ejemplo frente a la pequeña legión de ayuntamientos del PP que se han negado en redondo al requerimiento de la consellera de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, Susana Camarero para proceder al reparto de 571 menores migrantes que ha adjudicado el Gobierno a la Comunitat Valenciana.

Entre las negativas más estridentes figura la del alcalde de Elche, Pablo Ruz. Me topo con uno de sus asesores aúlicos, el profesor Antonio Luis Martínez Pujalte, y le suelto a bocajarro: "Dile a Pablo que se ha metido en un huerto del todo innecesario, más aún en su condición de católico practicante; no tenía ninguna necesidad". Intuyo que Pujalte en su fuero interno comparte mi punto de vista, o una buena parte.

Frente a los discursos xenófobos contra los "sin papeles" y "con papeles" la Federación de Contratistas de la Comunidad Valenciana denuncia que no se hace más obra, pública o privada, por falta de trabajadores. Harían falta 10.000 obreros más para que discurrieran con normalidad las tareas de reconstrucción en las zonas afectadas por la Dana. Y harían falta otros 30.000 más para toda la Comunidad Valenciana, según la Federación. La pregunta del millón: ¿Por qué no se forma a las personas migradas para asumir tareas de albañil? Digo albañil, carpinteros, encofradores... Ni PP ni PSOE se han formulado este terrible interrogante, limitándose a proclamar que hay que fomentar la formación en origen. ¿Y por qué no en destino? No creo que abunden muchas escuelas de FP en Mauritania o Senegal.

CODA: El presidente del Instituto Cervantes, García Montero, anda desatado en contra del director de Real Academia, Muñoz Machado: "Un experto en llevar negocios para las empresas multimillonarias". Tanta furia por parte del viudo de Almudena Grandes, como lo llama Zarzalejos en El Confidencial, me inquieta. Me da que pensar. Simplemente porque estoy contra la hiperbolización de la retórica. Para eso ya tenemos al ministro Óscar Puentes. ¿Está el PSOE en toda esta batalla para colonizar la RAE? No lo sé. Revuelto está el mundo de las letras. Mientras, Ferran Torrent renuncia al Premi de les Lletres Valencianas edición de 2024... muy a toro pasado. ¡Ay¡ Yo ya no me fío ni de mi sombra.