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TRIBUNA LIBRE

El asombroso paralelismo de los gobiernos valenciano y estatal

Publicado: 02/12/2025 ·06:00
Actualizado: 02/12/2025 · 06:00
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Realmente es asombroso que los dos grandes partidos nos tengan, respectivamente, en tan similar situación. No entraré en quien lo hace mejor o peor; pero sí me sorprende como valenciana el paternalismo con que la oposición aquí (y siempre avalada y aplaudida por la supuesta mayoría nacional del mismo signo) nos protege a los valencianos, como si fuéramos menores o idiotas: toman la palabra en nombre del pueblo valenciano para reivindicar nuestro derecho a hablar a través de las urnas visto que ha dimitido el presidente de la Generalitat. Gracias, papaíto.

Son buena gente los que nos protegen y toman la palabra y las calles en nuestra defensa. Pero yo me pregunto si acaso la situación nacional, en manos de esa oposición valenciana, no es tan o más preocupante que la nuestra autonómica. Si a Mariano Rajoy se le echó de la Presidencia por su supuesto conocimiento de la corrupción, ¿hay ahora alguna preocupación y/o judiciales sospechas para que temanos que el nuevo gobierno nacional y su partido pudiera hallarse en semejante o peor situación? No lo sé, cada valenciano tiene capacidad de pensar, o no, sobre ello.

Si el Gobierno lleva ya sus años sin lograr un presupuesto propio, ¿no forma parte ello de todo sistema parlamentario democrático (valga la redundancia) que tal imposibilidad vaya acompañada de la convocatoria electoral? Siempre ha sido así en las democracias occidentales y estaría bien respetar las costumbres y convenciones constitucionales que caracterizan el mundo democrático, al que pertenecemos por más que se corra un manto, que no diré de ignorancia, porque bien se sabe, pero sí al menos de indiferencia ante tan arraigado comportamiento constitucional.

Y si los supuestos (y no sé si coherentes) apoyos parlamentarios se venden caros en el ámbito nacional hasta el punto de producir dolor de muelas a la superministra, sin que importe si ello comporta reducción de disponibilidad para otras Comunidades, ¿no es un precio demasiado alto y repetitivo para lograr la permanencia en el poder pese a quien pese? El presidente del gobierno repite constantemente que piensa llegar al final de la legislatura cuente o no con la mayoría parlamentaria... Curioso modo de expresar que el cortijo es suyo... 

Pues que le vaya bien, presidente; pero Vd se aleja ,de día en día y cada vez más, del sistema constitucional, no solo del nuestro, sino de cualquier sistema constitucional democrático. ¿Hemos vuelto acaso al decimonónico régimen de constitución partidista?. Si Cánovas levantara la cabeza, diría ¡con lo que me costó convencer a los españoles de que la Constitución debía ser para todos…¡

Pero volvamos al redil valenciano. ¿Tan penoso e inconstitucional es que la mayoría trate de hallar puntos en común cara al nuevo nombramiento de presidente? Si, ya sé que Vox es como es, pero, rememorando de nuevo la restauración, recordaré que la política es, según Cánovas, "el arte de hacer lo posible".

¿Y tan rígidos y poco pragmáticos han de ser los partidos valencianos como para no saber hacer lo posible, sensato y conveniente para Valencia? Tampoco lo sé, pero no más lógicas que estas son las transacciones y coaliciones que se conforman a nivel nacional cueste lo que cueste. 

Y ¿qué lealtad pueden sentir los valencianos al saberse los más infrafinanciados y, si cabe decirlo, abandonados?, en fenómenos tan lamentables como la reciente Dana... 

En fin, el paralelismo es total aunque en direcciones encontradas. Unos piden que Valencia reaccione a una dimisión (sin duda debida y tardía, pero al fin y al cabo, el verbo dimitir solo se conjuga en esta tierra, tras la ejemplar e impecable dimisión de un valenciano aun en uno de los gobiernos de Felipe González. Del otro lado, la dimisión a nivel nacional es solo una petición parlamentaria, o a lo sumo preelectoral (e inútil a lo que parece), por parte de los más destacados lideres de la oposición en Madrid.

No está en la calle, como ocurre en Valencia, tal vez porque, conocida la impertérrita voluntad de permanecer en la Moncloa el presidente, no se quiere desgastar esfuerzos con lo imposible... Quien sabe, o es amor, o es la conocida paciencia del moro que estera a la puerta de tienda...

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