BENIDORM. El Instituto Social de las Fuerzas Armadas (ISFAS), dependiente del Ministerio de Defensa, va a invertir alrededor de 1,4 millones de euros en tareas de reparación y mantenimiento en uno de los cuatro bloques que tiene dentro del complejo de Ciudad Patricia en Benidorm. Este es el presupuesto que manejan solo para la obra, a lo que habrá que añadir otros casi 50.000 euros para la dirección de los trabajos que se contratará en un servicio aparte.
En concreto, el contrato licitado se refiere a "reparación de patologías constructivas y obras de conservación en el edificio del bloque A del Centro Residencial CG. Gutiérrez Mellado", ubicado en el complejo de Benidorm. Según recoge el proyecto, fue en noviembre de 2016 cuando emitieron un informe de evaluación sobre este edificio. Desde entonces hasta ahora su deterioro "ha aumentado" y los precios, por lo que han considerado necesario "redactar un proyecto que refleje el estado actual, su solución y su valor real".
El bloque afectado se construyó en 1982 y cuenta con 60 apartamentos que sirven para el descanso del personal del Instituto retirados, jubilados o cónyugues viudos cuyas parejas hubieran prestado sus servicios a la entidad.
En concreto se estima un precio de 1.400.274,36 euros, impuestos incluidos, para unos trabajos cuyo plazo se extiende en 18 meses. A lo que hay que sumar otros 46.910,5 euros para la dirección de obra. El periodo para la presentación de ofertas comenzó el pasado 24 de marzo y termina el 19 de mayo.
Desprendimientos, grietas y pérdida de impermeabilización
Los problemas hallados en el edificio se resumen en desprendimientos de material en fachadas, grietas y pérdida de impermeabilización. Así, han identificado desculegues del revestimiento en la cara exterior, y consideran que las zonas más afectadas y que presentan mayor daño son las fisuras que evidencian que el material está suelto, por lo que "es poco recomendable una intervención parcial". En cuanto a la pérdida de impermeabilización de la envolvente exterior aseguran que es "irreversible y una vez que se ha empezado a producir, tiene difícil solución". Como consecuencia, ha provocado la entrada de agua y humedad. Es más, aseguran que hay "revestimientos bufados que son susceptibles de caer en cualquier momento".
A todo esto hay que añadir que han encontrado un "evidente proceso de oxidación de armaduras" en las vigas de las cornisas de la cubierta ocasionando fisuras y roturas del hormigón. "Esta patología se ve acentuada al estar situada en ambiente marino, lo cual acelera los procesos de oxidación", recoge la documentación.
Pero como se decía, no todo son problemas derivados del paso del tiempo. La conservación de "la piel exterior de la edificación presenta un elevado estado de deterioro" que perjudica con más grietas, desconchamientos, pérdida de revestimiento, riesgo de humedades y filtraciones de agua de lluvia, así como a la imagen del conjunto. "Esta patología es producida de forma general por el deterioro del revestimiento a lo largo del tiempo, de la deficiente ejecución de la obra, y de la mala resolución de encuentros entre elementos constructivos", zanja el proyecto.