BENIDORM. Los ayuntamientos de Benidorm y Finestrat ultiman la entrada en la Comunidad de Usuarios de Vertidos de la EDAR de la Vila Joiosa-Orxeta. Una decisión que lleva desde 2012 solicitando la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) a las administraciones locales y que parece haber encontrado acomodo. Para ello, la Junta de Gobierno de la entidad dio un paso más para su integración el pasado 3 de septiembre.

Según ha podido saber este diario, la Comunidad de Usuarios inició entonces el expediente para la modificación de los estatutos que posibilitara la integración de los dos municipios, incluyendo ya la propuesta del texto. Un documento que pasará por el pleno de Benidorm el próximo viernes para su aprobación.

En su artículo 3 recoge que permite la autorización de vertidos a los usuarios "y dada la necesidad de verter aguas residuales depuradas al dominio público hidráulico". Precisamente, esto es lo que posibilitará la nueva condición de usuario del Ayuntamiento de Benidorm, según explicó el concejal del Ciclo del Agua, José Ramón González de Zárate, quien informó que están obligados a entrar en la Comunidad por sus vertidos en la depuradora de la Vila. Eso sí, señaló que Benidorm tiene capacidad de tratar todas sus aguas en la ciudad, sin embargo, aseguró que se derivaba una parte al municipio vecino para llegar al ratio que necesitan en la Vila para que no sea deficitaria.

El edil será nombrado como miembro de la Asamblea general junto a su compañera de Corporación, Mónica Gómez, tal y como figura en la propuesta que tendrá que ser aprobada el viernes en el pleno. Por su parte, el Ayuntamiento de Finestrat tiene previsto tratar este tema en una sesión próxima.

La distribución inicial de cargas económicas se establece en función de las aportaciones de caudal, calculada en base a los datos de 2024. De esta manera, deja a Orxeta en el 1%, Finestrat en el 16%, Benidorm en el 29% y la Vila Joiosa en el 54%. Unos porcentajes que se irán actualizando por año. 

Como ha venido contando de largo este diario, solo la Vila y Orxeta tienen autorización para verter aguas residuales procedentes del saneamiento de sus localidades al río Amadorio. Es más, el caudal de Benidorm y Finestrat ha sido objeto de sanción por parte del organismo nacional ya que consideraban que carecía de autorización por no estar dentro de esta Comunidad. 

Además de esta cuestión, el Ayuntamiento de Benidorm también se asegura una alternativa en caso de averías en su sistema propio.