BENIDORM. Benidorm ha vuelto a acoger por décimo año consecutivo la Jornada de Turismo que organiza la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE). Un encuentro que reúne al sector para analizar la situación actual en la que se encuentra, sus expectativas y retos por delante. Entre ellos se trató la irrupción de la Inteligencia Artificial (IA), la sostenibilidad o la mejora de la reputación del sector. Pero además, se nombraron como objetivos el incremento de la rentabilidad de los hoteles con la captación de menos clientes.
Así lo planteó el director del área de Estudios e Investigaciones de Exceltur, Óscar Perelli, después de un amplio análisis de la industria turística, en el que la mayoría de datos son positivos. Aunque la tendencia antes de la pandemia preveía que la actividad sería superior a la que finalmente han registrado.
“No nos va a faltar demanda”, dijo Perelli, asegurando que este es uno de los objetivos que persiguen todos lo sectores y que tiene garantizado el turismo. "Lo que tenemos que hacer es ser capaces de atraer la que queremos", apostilló. Sin embargo, lo que se puso encima de la mesa es buscar una forma en la que incrementar la rentabilidad pero reducir el número de clientes: "Maximizar los ingresos pero, quizá, con menos gente", comentó. Asimismo, recalcó como objetivos la inversión en reposicionamiento de producto y "mejorar la distribución de los turistas", explicando que había que "decrecer" donde la sociedad "se revela contra nuestra actividad".
En este sentido, también marcó la importancia de mejorar en reputación, asegurando que es un sector de relevancia que trabaja por la mejora de la empleabilidad o la sostenibilidad. Pero reconoció que tiene unos condicionantes laborales, la "masificación que percibe" o el impacto ambiental. Todo ello, dijo, tiene como consecuencia problemas operacionales como es el acceso a profesionales formados. El personal ve en estos trabajos ligados a la hostelería un periodo de paso y no para quedarse y labrarse un futuro y una carrera.
Además, también conlleva "reacciones punitivas" por parte de los responsables políticos, como es la tasa turística de la Comunitat Valenciana, recordó el responsable de Exceltur. Una medida aprobada por el anterior Gobierno autonómico y que Carlos Mazón, ganador de las elecciones, reiteró este jueves en su primer acto con los empresarios que derogará cuando entre al poder.
Por lo que respecta a las viviendas turísticas, aunque dijo que "nadie puede estar en contra", sí que reconoció que esta actividad está "afectando a los residentes" y desplazando a la población. Algunos casos como Benidorm son notorios, con edificios en el casco antiguo que se reconvierten en bloques de hospedaje para viajeros, o incluso hay quienes abandonan estas zonas para evitar ruidos y molestias aparejadas al turismo. Con todo, informó que desde hace 20 años, las plazas hoteleras en España han crecido un 1%, mientras que el alquiler vacacional un 65%. Y remató el discurso afirmando que los hoteles generan más dinero, empleo e ingresos fiscales.
Por todo ello, animó al sector a "contar de manera más intensa" su actividad. En este repaso sobre la situación de la actividad, abogó por una mejor gobernanza, aunque puso de ejemplo positivo la Comunitat Valenciana o renovar los espacios públicos y turísticos. Para Perelli, los municipios turísticos están penalizados en cuanto a la financiación, teniendo que afrontar servicios a la ciudadanía que en momentos de temporada alta multiplica su población, y por tanto, la atención por parte de los Consistorios sin una compensación a la altura del gasto que supone.
Así, reclamó mejoras y lamentó que una ciudad como Benidorm, tercera con mayor capacidad alojativa por detrás de Madrid y Barcelona, no cuente con una lanzadera. Con todo, entre sus objetivos está la reducción de la huella de carbono, "preservando la conectividad a precios accesibles". Finalmente, aseguró que los fondos Next Generation se habían convertido en una oportunidad perdida.