ALICANTE. Las instalaciones de la antigua refinería de La Británica quedan a disposición del Ayuntamiento de Alicante, a la espera de que se formalice un último trámite registral de regularización de las parcelas sobre las que se asienta, que continúa pendiente de completarse desde julio de 2022. Así lo anticipó Alicante Plaza entonces. Y así queda ratificado ahora, a través de una respuesta facilitada por el Gobierno Central a la pregunta formulada por el diputado de Compromís, Alberto Ibáñez, para que se precisase en qué fase se encontraba el expediente de concesión de esa antigua espacio industrial. 

En concreto, en esa respuesta, fechada el pasado jueves 22 de febrero, se pone de manifiesto que ese último paso administrativo para que el Ayuntamiento asuma la gestión del espacio sigue sin haberse ejecutado más de un año y siete meses después. De hecho, la contestación del Gobierno especifica que la delegación de Economía y Hacienda en Alicante dirigió un oficio el 20 de julio de 2022 al Ayuntamiento de Alicante en el que le informaba de la situación registral y catastral del inmueble, "así como el criterio expuesto por la Abogacía del Estado" favorable al traspaso de las galerías. Además, en ese ofició se ofrecía "la posibilidad de aceptar la cesión gratuita del inmueble a condición de asumir la obligación de realizar las actuaciones necesarias para su regularización", al tratarse de un "supuesto permitido por la legislación patrimonial aplicable".

Sin embargo, la misma contestación del Gobierno también añade que "hasta la fecha no se ha tenido respuesta del Ayuntamiento solicitante, por lo que no es posible hacer previsiones sobre la fecha de finalización del expediente" para que pueda producirse la entrega efectiva de las galerías al Ayuntamiento. O lo que es lo mismo, la respuesta vuelve a derivar la resolución sobre el futuro del conjunto patrimonial propiedad del Estado al propio Ayuntamiento, que sigue sin haber formalizado esa fase del proceso de regularización, según precisaron fuentes municipales consultadas por este diario hace una semana. 

En esta línea, como informó Alicante Plaza, el antiguo recinto industrial continúa siendo uno de los espacios llamados a convertirse en contenedor cultural de la ciudad que continúa al alcance de la administración local, sin que se haya definido su uso específico, más allá de los planes anunciados durante el pasado mandato para llevar a cabo posible rehabilitación y conversión en un centro visitable, capaz de acoger eventos culturales, congresos o conciertos, en el que también se subraye su papel histórico como ejemplo único de arqueología industrial por la singularidad de su construcción en subterráneo. Ese plan director de uso del recinto, redactado por encargo de la Concejalía de Urbanismo bajo la coordinación del ahora exedil Adrián Santos Pérez (Ciudadanos), quedaría ligado a una inversión próxima a los 15 millones de euros, para los que se trataría de obtener subvenciones de otras administraciones, según se concretó entonces.