ELDA. El vicepresidente segundo de la Generalitat y conseller de Vivienda y Arquitectura Bioclimática, Rubén Martínez Dalmau, ha visitado este miércoles la capital del Medio Vinalopó para firmar un convenio por el cual Elda adquiere el soporte jurídico para la compra de inmuebles y su puesta a disposición como viviendas de protección social. De este modo, tal y como ha explicado Dalmau, el Ayuntamiento “se incorpora a la red de municipios que tienen delegada la competencia de tanteo y retracto”, esto es, el derecho que les otorga la facultad de adquirir un bien con preferencia sobre el resto de compradores.
Según el conseller, se trata de “uno de los instrumentos más importantes” de los que dispone actualmente la Generalitat para “fortalecer el papel de los municipios” en esta área y “conseguir que el derecho constitucional a la vivienda sea un derecho real”. Un derecho que, en palabras del alcalde eldense, Rubén Alfaro, “es imprescindible para la estabilidad y la emancipación, sobre todo de los jóvenes, que están teniendo muchas dificultades para acceder a una vivienda”. En concreto, ha detallado el primer edil, el Ayuntamiento tiene ahora 316 viviendas públicas y “en Elda hay unas 100 personas en lista de espera para acceder a una de ellas”.
Dalmau ha explicado que, desde el momento en el que se ha firmado el convenio, cada vez que en Elda haya una compraventa de un gran tenedor hacia un fondo de inversión (u otro tipo de entidad financiera), el Ayuntamiento será informado por los servicios territoriales de Vivienda del precio de esa operación y, en función de la naturaleza de la compraventa, la ubicación de los inmuebles y su tipología —entre otros factores—, decidirá si le interesa tantearla y, por tanto, pagar al vendedor el dinero que iba a ofrecerle el comprador inicial. De esa forma, el consistorio adquirirá la casa y la incorporará al parque público de Elda como vivienda social.