ELCHE. El próximo pleno municipal, que tendrá lugar el martes 29 de abril, también aprobará a priori el estudio de detalle presentado del futuro hotel que se ha proyectado en la parcela frente a la playa del Carabassí, sector AR-1 de Arenales del Sol. La iniciativa ya se presentó hace ahora un año, a cargo de la mercantil Miraclot. Se someterá a aprobación el documento, que lo que hace es "ordenar esta zona ante el proyecto que contempla la construcción de un apartahotel de 3 estrellas con piscina y un local comercial de grandes dimensiones", recuerda el edil de Urbanismo, Francisco Soler.
El vicealcalde recuerda que en el pasado se llegó a proyectar un camping que no se desarrolló, lo cual dejó el solar con una parte de cimentación. Finalmente ha sido este el proyecto que parece que gana enteros. El mismo estaría escalonado en varias alturas de acuerdo a la morfología de la parcela. Una iniciativa "que seguro va a favorecer a todo el entorno y de interés para la ciudad", añadía el edil. Eso sí, el concejal no se atreve a dar posibles fechas, ya que este es tan solo un paso urbanístico más hasta llegar a la futura licencia de obra.
En cualquier caso se presume que pueden ser varios años acorde a este tipo de proyectos, y sobre todo porque depende de la iniciativa privada. "Paralelamente el Ayuntamiento seguirá con la parte que le toca, la municipal, que por nosotros podría estar en meses".
Trayectoria del solar
Primero se planteó como un aparcamiento de pago de 278 plazas, después como un área de caravaning, pero finalmente será un aparta-hotel. La mercantil plantea más de 16 millones de euros de inversión para su materialización, con 200 habitaciones y una superficie construida entre sótanos y rasante de 16.116 metros cuadrados.
Afecciones
En su día el alcalde Pablo Ruz destacaba que no tiene afecciones urbanísticas, tampoco por el Pativel, a pesar de la cercanía a la primera línea de mar, dado que "este solo afecta a suelo no urbanizable y urbanizable sin proyecto urbanístico". En este caso se trata de suelo urbano consolidado en el Plan General de 1998, con uso terciario. No obstante, por la cercanía al Clot de Galvany apuntaba que hay que salvaguardarlo, ya que de igual forma que muchos han celebrado el proyecto, entidades ecologistas mostraban su contrariedad al entender que supone más presión urbanística en entorno natural y muy próximo al Clot, espacio protegido.