ELCHE. En su visita para anunciar que aproximadamente en verano esperan que se puedan derruir los bloques 21 y 23 de la calle Llimoner en Los Palmerales, el vicepresidente segundo y conseller de Vivienda y Arquitectura Bioclimática, Rubén Martínez Dalmau, también puso de relieve que ahora que esta actuación está perfilada, se va a empezar a trabajar para la demolición de los bloques 25 y 27 de la misma calle. Desde fuentes municipales y autonómicas fijan el derrumbe de los mismos para 2022.

En este sentido, el objetivo es por tanto derribar toda la manzana. En el caso de estos otros dos bloques, también se encuentran en estado de degradación, que es el motivo principal por el que se quieren demoler. Según el edil de Derechos Sociales, Mariano Valera, hay muchas familias residiendo legalmente, aunque no todas. En cualquier caso, la degradación de los mismos sumado a la situación social ha generado problemas de salud pública con el menudeo de droga, por lo que se quiere actuar de raíz y repetir la misma operación que con los números 21 y 23: recolocar a las familias en otros pisos y tirar ambos inmuebles abajo. 

Primero mediación y paralelamente preparar las viviendas de la EVha en el barrio

No obstante, aún se tiene que empezar a trabajar el proceso. De momento, hay que esperar a que se incorpore un nuevo equipo de intervención de trabajadores sociales a mitad de año, que se coordinará con el equipo de barrios inclusivos del Ayuntamiento que está trabajando en Los Palmerales. La idea es mediar para regularizar la situación de las familias que lo necesiten y realojarlas, tanto a ellas como a las que están en situación legal, en otros bloques de vivienda social del barrio que son propiedad de la Entitat valenciana d'habitatge i sòl (EVha). Según explicaba el conseller, no quieren actuar sin que haya alternativa habitacional para los vecinos.