ALICANTE. Llega la hora del litoral sur de Alicante. Al menos, de parte de él, a la espera de que pueda materializarse la retirada de las vías del cercanías con Murcia con la ejecución de la llamada variante de Torrellano. El Ministerio para la Transformación Ecológica y el Reto Demográfico acaba de validar la versión definitiva del proyecto con el que se pretende promover la regeneración del tramo de costa del Saladar de Aguamarga, entre la Cala de los Borrachos y el norte de Urbanova. La propuesta comprende la restauración ambiental y la renaturalización de ese pasillo costero que limita hacia el oeste con el Saladar de Aguamarga y la carretera de Urbanova y hacia el este con la Playa de Aguamarga. "El espacio constituye una estrecha y alargada franja de terreno que se corresponde con un antiguo cordón sedimentario litoral que separaba las antiguas marismas (posteriormente adaptadas como salineras) del Mar Mediterráneo", detalla el proyecto.
En ese ámbito, se pretende recuperar el sistema dunar, eliminar vegetación invasora, renovar el vallado actual por otro blando que procure la protección del espacio y promover el desmontaje de infraestructuras y edificaciones en desuso para favorecer la recuperación natural de los espacios de playa. Todo ello con el propósito de propiciar la protección del dominio público marítimo terrestre, de favorecer su uso y disfrute público y de recuperar sus características naturales modificadas por la introducción de actividades impropias. Para la consecución de esos objetivos se prevé una inversión de más de 341.000 euros (341.126,64€) a cargo de la Dirección General de Costas, como instancia encargada de licitar la ejecución de las obras, que -salvo que se generan complicaciones sobrevenidas- deberán quedar completadas en un plazo de un año. Por lo pronto, no concurre la posibilidad de que su desarrollo pueda sufrir retrasos asociados a la tramitación de expropiaciones, ya que el suelo es íntegramente de titularidad estatal.
¿En qué consiste en concreto la intervención planteada? De acuerdo con la propuesta definitiva, en la que se ha tenido en cuenta las alegaciones formuladas por entidades conservacionistas como la Colla Ecologista-Ecologistas en Acción, se diseñan actuaciones divididas en dos tramos. En primer término, en el tramo sur se prevé abordar la rehabilitación de la gola o canal de entrada a la antigua explotación salinera, lo que incluye su limpieza, la reconstrucción de sus márgenes laterales de mampostería y la de del pretil superior de la carretera de Urbanova. Además, también se dispondrá de señalización divulgativa sobre la antigua explotación salinera.
En el espacio contiguo a Urbanova, se contemplan la limpieza y naturalización de los terrenos que vienen utilizándose como zona de aparcamiento de modo que quede integrado "de forma natural con la playa existente". Al tiempo, se plantea la recuperación completa del cordón dunar, lo que abarca la eliminación de plantas invasoras, la plantación de especies existentes e interesantes desde el punto de vista ecológico y la instalación de captadores de mimbre y de un vallado blando, según se concreta en el propio proyecto.