ALICANTE. Alicante completa el protocolo de medidas progresivas para la autorización del baño en los arenales de la ciudad desde este mismo lunes, 1 de junio, basado en el respeto de las distancias de seguridad entre bañistas y en la adopción de medidas higiénico-sanitarias en el uso de las instalaciones, como las pasarelas de acceso o los lavapiés. Para ello, se contará con la vigilancia de la Policía Local y el apoyo del personal de Protección Civil "con el fin de intensificar la labor informativa y precisar a los usuarios cómo deben organizarse y cuál debe ser su disposición en la superficie de arena", según ha explicado este sábado el alcalde, el popular Luis Barcala.
En gran parte, ese operativo de uso se basa en las medidas adelantadas por Alicante Plaza, como la disposición de un corredor libre de sombrillas y toallas junto a la orilla del mar, de 10 metros de amplitud, que quedará reservado solo para el paseo y acceso al baño. Además, se habilitarán tres plataformas de cinco metros de anchura "delimitadas con postes" y marcadas por las máquinas de limpieza de la UTE concesionaria del servicio de limpieza (UTE Alicante), además de con un sistema de cartelería específico sobre su disposición. Será en estos canales de la zona seca de la arena en los que se podrán distribuir los bañistas, en el horario habitual de uso de las playas, comprendido entre las 10:00 y las 20:00 horas.
Respecto al uso de las instalaciones de la playa, como las pasarelas de madera o los lavapiés, al margen de la disposición de pasillos separados de acceso y salida distintos "convenientemente señalizados con marcas sobre el sentido de cada uno de ellos", se establece la obligación de ir calzado hasta llegar a la arena, al igual que a la hora de utilizar los lavapiés, que se desinfectarán cuatro veces al día.
En esta línea, el primer edil también ha señalado que se dispondrá del apoyo de dos drones utilizados por el Servicio de Extinción y Prevención de Incendios (SPEIS) que irán alternándose en distintos horarios y días de la semana en las playas en las que resulte viable (en esencia, en la Playa de San Juan, La Albufereta y en El Postiguet, ya que la de Urbanova está afectada por el área de influencia del aeropuerto de El Altet) con el fin de controlar si existe un exceso de aforo o no se cumplen las distancias de separación requeridas.
El dispositivo de vigilancia y servicio informativo contará con 50 agentes, además de los voluntarios de Protección Civil
En caso de que no se cumplan las condiciones de seguridad, se dará aviso a la Policía Local para se actúe en consecuencia hasta el punto de que se procederá a expulsar a los bañistas que estén infringiendo las normas de uso. "Esos drones nos permitirá controlar las aglomeraciones; cuando se infrinjan las normas de distancia o aglomeración, los drones darán aviso a la Policía o a Protección Civil y advertirán a los usuarios de que tienen que separarse", ha recalcado. Además, ha añadido que "el incumplimiento de estas normas supone poner en riesgo la seguridad de los demás, y por lo tanto, tendrá que abandonar la playa quien no las cumpla", ha recalcado Barcala.
El primer edil ha insistido en la necesidad de actuar "de forma responsable" en el cumplimiento de las medidas de seguridad "que se han dispuesto para todos". "Es fundamental mantener las distancias entre usuarios y respetar las áreas marcadas con las plataformas y cumplir con las normas de entrada y salida a la zona de baño y a la zona de playa", ha recalcado. "El deporte estará autorizado en la zona seca, hasta 15 personas, sin contacto", ha añadido.
La vicealcaldesa y edil de Turismo, Mari Carmen Sánchez (Cs), ha detallado que la prioridad era "poder abrir las playas desde el lunes porque Alicante está preparado para ello". "Así invitamos a que la gente se incline por reservar sus estancias en hoteles en la ciudad o programe sus vacaciones", ha insistido. "La apertura de las playas servirá para impulsar la recuperación paulatina de las reservas hoteleras, para incrementar el negocio de la hostelería y el comercio y, en definitiva, para generar riqueza y puestos de trabajo", ha incidido. Sánchez ha confirmado que, como también había adelantado este diario, se dispondrá del servicio de socorrismo y salvamento en playas desde el mismo lunes, después de que la UTE concesionaria haya cumplimentado los últimos trámites administrativos requeridos.
Se dispondrá del apoyo de drones sobre todo en los fines de semana y se prevé ir implementando otros medios tecnológicos como una app con la llegada de julio
La responsable de Turismo también ha concretado que los bañistas deberán llegar hasta la playa provistos de mascarillas y que deberán respetar las direcciones de acceso y salida marcadas en las pasarelas. Ha recalcado la obligación de ir calzado tanto en las pasarelas como en el uso de los lavapiés y ha insistido en el respeto de las distancias de seguridad, para lo que se ha procurado esas plataformas de 5 metros de amplitud, delimitadas con balizas o postes de dos metros de altura y distinto color, "de modo que los bañistas solo tendrán que preocuparse de mantener las distancias de seguridad laterales" de dos metros.
También ha abundado en la delimitación de ese corredor libre de sombrillas y toallas de entre 6 y 10 metros de amplitud, en función de cada tramo y de cada playa concreta, en el que solo se podrá pasear, de modo que "no se podrá jugar a las palas ni otras prácticas que suelen ser habituales junto a la orilla; este año, las condiciones de uso van a tener que ser diferentes". Igualmente, ha recalcado la autorización de la práctica de deporte en la zona seca, pero ha añadido que las zonas de juegos infantiles y los aparatos de gimnasia biosaludable seguirán precintados por el momento. Lo mismo sucederá con los baños públicos.