ALICANTE. La reforma fiscal promovida por el PP al frente del Ayuntamiento de Alicante, con una rebaja del 5% en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) como medida central (entre otras), se enfrenta a su examen final en el pleno ordinario del próximo jueves, día 20. Y todo parece indicar que quedará a la voluntad de los cinco concejales de Ciudadanos (Cs) y la de los dos ediles no adscritos, Fernando Sepulcre y Nerea Belmonte. Como mínimo, ese es el escenario más probable a la vista del resultado de la votación del pleno de su aprobación inicial, el pasado 15 de octubre, y a la vista de la propuesta de rechazo de las alegaciones formuladas por Guanyar (el único grupo político de la oposición que registró objeciones), que se debatirá en la comisión de Hacienda este viernes.
Se da por seguro que si el PP decide obviar esas alegaciones, el grupo municipal de Guanyar mantendrá su posición y votará en contra de la modificación de las tres ordenanzas en liza: la ya citada sobre el cobro del IBI, la del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y la del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM). La cuarta ordenanza que se modificó, la del Impuesto de Construcciones y Obras (Icio) ya está en vigor, al no haberse registrado alegaciones frente a los cambios.
Los cinco concejales de la plataforma electoral que lidera Esquerra Unida (EU) fueron los únicos que rechazaron las revisiones de esas tres normas propuestas por el PP durante el desarrollo del pleno y ya entonces anunciaron la presentación de alegaciones para intentar que se incorporasen algunas de sus sugerencias.
Básicamente, como ha informado este diario, esas alegaciones trataban de conseguir la congelación del IBI y nuevas bonificaciones para las familias más vulnerables, "que el impuesto se cobre a la Iglesia y que se incorpore a la ordenanza el recargo a las viviendas vacías que contempla la Ley aunque no pueda aplicarse hasta que el Gobierno Central apruebe el desarrollo reglamentario exigible", según recordó el propio líder de Guanyar.
En lo que respecta al IAE, "que sólo pagan las empresas que facturan más de un millón de euros al año, reiteramos nuestra propuesta de subida en un 15%, lo que supondría más de un millón de euros adicional en recaudación que podría destinarse a políticas sociales para las personas y familias más desfavorecidas". Y en relación al IVTM, en sus alegaciones Guanyar reivindicaba "mayores bonificaciones para los vehículos menos contaminantes (mantenidas en el mismo porcentaje durante tres años: 75% para vehículos A, 65% para vehículos B y 50% para vehículos C) y que no se aumente la bonificación ya existente de un 50% a los vehículos históricos, que consideramos más que suficiente".