ALICANTE. El año 2020 fue especialmente duro para el sector del retail, con el cierre total del comercio entre marzo y mayo, y las restricciones posteriores de aforo y horarios. El principal exponente del sector en la provincia, la cadena de tiendas de artículos deportivos Sprinter (y el grupo del que forma parte con la británica JD Sports y la portuguesa Sport Zone), no escapó a la tendencia general, y sufrió especialmente con el confinamiento.
Sin embargo, en el segundo semestre del año, a partir de la desescalada, las tiendas del grupo incrementaron sus ventas un 10% respecto al mismo periodo del año anterior, según recoge en sus resultados anuales (publicados este martes) la matriz británica, JD Sports Fashion PLC. El grupo que dirige Peter Cowgill, que cierra sus ejercicios el 31 de enero, incrementó ligeramente sus ingresos pese a la pandemia, hasta 6.167 millones de libras (7.100 millones de euros).
Del total del negocio del grupo, que tiene sus dos territorios punteros en Reino Unido y Estados Unidos, las ventas en Europa aportaron 1.580 millones de libras (1.800 millones de euros), un 3% menos que en 2019 (1.860 millones de euros). En el caso concreto de España y Portugal, donde opera el grupo de Sprinter, el informe de las cuentas señala que las ventas cayeron un 80% durante los meses del cierre total en nuestro país, pero que en el segundo semestre se incrementaron un 10% respecto a 2019.