ALICANTE. El sector del coworking es ya una industria con todas las letras. Así ha quedado de manifiesto en la primera jornada de la Coworking Spain Conference (CWSC), el mayor encuentro nacional de operadores de espacios colaborativos, cuya octava edición se celebra esta semana en el Adda con Alicante Plaza como media partner. El fundador de CWSC, Manu Zea, destacó durante su intervención en la jornada matinal, dedicada a analizar el estado del sector, que el coworking superará los 800.000 metros cuadrados de espacio a finales de este año gracias a la entrada de grandes operadores en el negocio.
La cifra de espacio dedicado a oficinas flexibles al cierre del ejercicio en curso supondrá ocho veces la que se destinaba al mismo segmento hace solo siete años, en 2012, cuando se celebró la primera conferencia. En estos momentos hay unos 1.500 espacios registrados como coworking, de los que el 60% tiene unas dimensiones inferiores a 200 metros cuadrados, y el 3% (donde se encuentran los grandes operadores como Spaces, WeWork o Utopicus) son espacios de más de 1.000 metros cuadrados. "El 3% de los espacios controla el 30% del mercado", destaca el fundador de la CWSC.
En cuanto al impacto económico, Zea calcula que el volumen de negocio del sector se mueve en torno a los 150 millones de euros anuales. En esta cifra se computan los alrededor de 82 millones de euros al año de ingresos que genera el alquiler de puestos de trabajo (de los que ese 3% de grandes espacios se lleva unos 24 millones), y el resto de servicios como alquiler de despachos o salas de reuniones. Se calcula que para el cierre de este año, el negocio solo en puestos de trabajo (hay censados unos 37.000 en toda España) llegue a 106 millones de euros, tras la apertura de nuevos coworking y oficinas flexibles a lo largo del ejercicio en curso.