ALICANTE. Ha llegado la hora de la verdad. La negociación entre el Elche y el central Marco Moreno entra en la fase decisiva. Las partes se han dado tres días para volver a la mesa y resolver si empiezan a caminar juntos o continúan por separado. Es decir, de aquí al fin de semana se debe poner fin con fumata blanca o negra una negociación cuyo origen son contactos que se remontan meses atrás y por los que el propio Christian Bragarnik fue interpelado por Alicante Plaza en su última rueda de prensa. Entonces el empresario remitió a la secretaría técnica; era un momento en el que no se sabía en qué categoría iba a competir el equipo de Eder Sarabia en la campaña 2025/26, pero desde hace un mes ya está claro y además para bien.
El polivalente zaguero de 24 años, capaz de desenvolverse en el eje de la defensa y también como lateral derecho, se formó como futbolista a caballo entre su ciudad natal, Las Palmas, y la cantera del Atlético de Madrid (que conserva parte de los derechos sobre él), ha sido internacional con las divisiones inferiores de La Roja y en el curso 2024/25 ha jugado en Portugal con el Farense que ha terminado descendiendo a Segunda División (y también ostenta otra parte de los derechos sobre el jugador). No obstante lo anterior, con 27 participaciones en 34 jornadas, Marco Moreno ha sido de los más destacados del cuadro de Faro que con la pérdida de categoría se ve obligado a abrirle la puerta de salida.

El interés de las partes en llegar a un acuerdo se mantiene (en la planta noble del estadio Martínez Valero gusta este futbolista que ve en el Elche una oportunidad para brillar en LaLiga), pero a la puerta del futbolista llaman con insistencia terceros, empezando por el Levante (que está estos días concretando incorporaciones para su zaga como las del lateral Jeremy Toljan y del central Alan Matturro), pero también un club de LaLiga Hypermotion que apuesta fuerte por él.