Deportes

OPINÓN

La incapacidad defensiva de Emery

Suscríbe al canal de whatsapp

Suscríbete al canal de Whatsapp

Siempre al día de las últimas noticias

Suscríbe nuestro newsletter

Suscríbete nuestro newsletter

Siempre al día de las últimas noticias

VALENCIA. Vaya por delante que no considero a Unai Emery un técnico incapaz. Más bien al contrario. Creo que es capaz, pero solo de trabajar el aspecto ofensivo de sus equipos. Ahí suele jugar con sistemas, movimientos hacia dentro, desdoblamientos, jugadas de estrategia y hasta desmarques coreografiados como el del segundo gol de Soldado frente al Racing de Santander.

Sin embargo, parece no tener la capacidad de hacer que sus equipos defiendan. Y léase bien la frase anterior. Que sus equipos defiendan, no que sus defensas defiendan. En cuatro años (con este que comienza) la han traído a tres porteros y ocho jugadores de retaguardia. Y la situación no ha mejorado en ningún momento.

Hay varias muestras de ello. En su primera temporada, excepción hecha de Villa, el gran salvador del equipo en varios encuentros, fue primero Renan y, sobre todo, César. Lo mismo ocurrió un año más tarde, llegando incluso a pedir la internacionalidad para el extremeño. Y la pasada campaña tuvo la fortuna de vivir la maravillosa irrupción de Guaita. Todos ellos hacen llegar al imaginario colectivo blanquinegro imágenes positivas, mientras que es difícil decir lo mismo de Miguel, Mathieu, Dealbert, David Navarro o Ricardo Costa.

Sin embargo, la culpa no es exclusiva de ellos. Como dice un amigo mío, la defensa la compone el sistema defensivo, donde a los centrales y laterales se unen las coberturas de los interiores, de los mediocentros y en ocasiones hasta de los mediapuntas. Pero para cualquier aficionado al fútbol es muy evidente que en el Valencia no defienden todos. Que Pablo no suele bajar a ayudar en la derecha. Que Mata pocas veces hacía lo propio en la izquierda y que solo Topal y, en ocasiones Albelda, echan una mano atrás. El ejemplo más claro son los numerosos goles encajados por el Valencia en una contra tras servir un córner a favor. O sea, el abecé de lo que no debe hacerse.

Al final, cuando algo falla durante tanto tiempo supone dos reflexiones: que tus futbolistas no tienen el nivel o que tú no eres capaz de que ejerzan los movimientos necesarios para poner fin a un problema sempiterno. Y, visto el desfile de centrales, laterales y guardametas, el único pensamiento hacia el que podemos inclinarnos es el segundo.

Dicho esto, quizá el técnico debería ser (de una vez por todas) fiel de verdad a sus principios. En su presentación, su primer día, dijo que prefería ganar 4-3 que 1-0. Pues si es así hazlo. Al final, la Liga la van a ganar el Real Madrid o el Fútbol Club Barcelona. Y tú, al menos, sigas un año más o finalices tu etapa en 2012, habrás dado espectáculo y, sobre todo, habrás explicado desde el inicio a los aficionados qué se van a encontrar en Mestalla. Sin engaños. Sin intentar decir que ‘tenemos que mejorar', como llevas tres años diciendo en sala de prensa. Ojalá seas valiente, Unai. De ese modo, seguro que no te van a faltar equipos a los que entrenar.

_______________________

(*) DAVID BLAY es periodista

Recibe toda la actualidad
Alicante Plaza

Recibe toda la actualidad de Alicante Plaza en tu correo