ALICANTE. Un equipo cogido con alfileres como materialización del enésimo proyecto de cartón piedra, propio de un club histórico e histérico donde los haya y en el que, para más ‘inri’, hace tiempo que reinan el conformismo y la autocomplacencia. Nos encontramos a un paso de que lo anterior sea irrefutable hasta para ese seguidor del Hércules CF capaz de emular a ese feligrés que sigue donando limosna a sabiendas de que el cura se queda con ella. El herculano medio, por el contrario, hace tiempo que tiene claro que así no vamos a ningún sitio, que el ascenso de 2024 fue flor de un día, como lo fue el de 2010 y lo será cualquier éxito deportivo que pueda venir si, al tiempo, no se le da la vuelta como un calcetín a la entidad de Foguerer Romeu Zarandieta. A diferencia del estadio Rico Pérez, del que no hay nada aprovechable por mucho que se empeñen aquellos que han de rascase el bolsillo, en el club blanquiazul no todo es un desastre, incluso en la primera plantilla, pero sí es cierto que el primer equipo, la locomotora que ha de tirar del tren, sigue sin arrancar. Y como Enrique Ortiz, propietario con permiso de la Fundación Hércules CF de la Comunidad Valenciana, lo fía todo a que entre la pelotita gastando lo mínimo posible… estamos como estamos: doce años fuera del fútbol profesional y contando.

Teniendo en cuenta los precedentes, cuesta creer que Rubén Torrecilla hubiese sido destituido de no marcar Ben Hamed (y con ello redimirse del penoso partido que firmó una semana antes en Sevilla) en el último suspiro del duelo de El Maulí un tanto que evitó la sexta derrota en diez jornadas, la quinta de cinco a domicilio y que habría mantenido al equipo en zona de descenso a Segunda Federación. Y es que conviene tener presente no solo que Ortiz decidió en junio que Rubén Torrecilla debía cumplir su tercer año de contrato en contra de lo que le decían todos los que le rodean, también que lo ha sostenido en el cargo este curso tras los petardazos en Cartagena y Teruel…

Si bien ha mejorado a nivel de resultados con respecto al arranque de curso, aunque no tanto en cuanto a juego, los siete puntos de los últimos doce posibles que ha sumado el Hércules en sus últimos cuatro envites se antojan poca cosa pensando en el medio plazo y en aspirar a otra cosa que no sea ver más cerca la zona baja de la tabla que la alta. Y lo anterior pese a que el grupo 2 es igualado por abajo: hay aspirantes a todo, pero están tan mal como el Hércules.

Los blanquiazules siguen defendiendo mal y atacando peor. En un equipo de fútbol atacan y defienden todos, pero el domingo los zagueros del Hércules recuperaron esa vieja costumbre de dispararse en el pie; el tanto rival y la expulsión de Javi Jiménez son dos buenos ejemplos de lo anterior. Al tiempo, en ataque, si bien es cierto que en la segunda mitad contra el Antequera CF por fin se vio a los delanteros rematar a puerta, ‘Slavy’ y Fran Sol continúan sin estrenarse.

Es verdad que la gran cantidad de bajas (factor negativo cuyo efecto debe atenuarse a partir de ahora, aunque jugadores importantes como Roger Colomina tardarán aún en volver), pero es evidente que no hay una plantilla de tanto nivel como se presumía y que los dos meses que restan hasta enero pueden hacerse muy largos, con independencia de que se pesque en el mercado de parados. Esto y, especialmente, un cambio de entrenador son las únicas soluciones a las que se puede recurrir fuera de los períodos ordinarios de fichajes.

Lo normal (que no siempre es lo acertado) en un club normal, teniendo en cuenta el juego y la racha de resultados del Hércules, es que Torrecilla hubiera caído ya, pero no lo ha hecho y aunque no sean precisamente legión los que creen que el punto obtenido el domingo puede ser el de partida de una dinámica de ‘media inglesa’ (esa que protagonizó el curso pasado la AD Ceuta para remontar el vuelo, terminando como campeona de grupo y ascendiendo a LaLiga Hypermotion)… esa posibilidad está ahí. CE Europa en casa; CD Eldense a domicilio; Real Betis Deportivo en casa; y Nàstic de Tarragona a domicilio son, por ese orden los cuatro próximos rivales que tiene el Hércules, que arrancará la undécima jornada como decimocuarto con 11 puntos, los mismos que tiene el Marbella FC y Algeciras CF, este último marcando el descenso por diferencia general de goles.