ALICANTE. En una sala del centro de Alicante se firmaba este miércoles, 23 de julio, un documento que aspira a tender un puente cultural entre Europa y África. La escuela alicantina de cine Alicante Film School ha alcanzado un acuerdo con la Académie Marocaine de l’Audiovisuel, du Cinéma et des Arts, una institución con sede en la ciudad de Salé, al norte de Marruecos. A simple vista, se trata de un convenio educativo, pero bajo esa rúbrica se esconde la voluntad de tejer vínculos a través del lenguaje más universal: el cine.
Este convenio se ha realizado en el marco del XI Encuentro Internacional de Artistas de la Kasbah, en Alicante, en el que se promueve el conocimiento de las culturas a través del arte y que es apoyado por numerosas instituciones de Alicante, España y Marruecos. El pacto, que tendrá vigencia durante tres años, establece un marco de colaboración para el desarrollo de proyectos formativos conjuntos, intercambios académicos y culturales, y coproducciones audiovisuales que permitirán a estudiantes y docentes de ambas instituciones colaborar codo con codo. Más allá de lo académico, la alianza pone el acento en algo más profundo: la conexión entre culturas. “Este convenio no solo es una oportunidad de crecimiento artístico, sino una forma de construir puentes entre pueblos a través del cine, la cultura y el diálogo”, afirman desde la dirección de Alicante Film School.
Coproducciones en árabe y español
Uno de los hitos del acuerdo es el compromiso de realizar una producción audiovisual conjunta cada año a partir de 2026. Rodadas en español y árabe, estas piezas permitirán a los estudiantes enfrentarse a un proceso creativo real en entornos multiculturales, trabajando junto a compañeros y profesores de otras tradiciones narrativas y estéticas. Este enfoque, que apuesta por la coproducción desde la etapa formativa, supone un salto cualitativo en la forma de enseñar cine. Pero también refleja una mirada sobre el poder del audiovisual: la capacidad de contar historias que crucen fronteras, que mezclen acentos y enfoques, que reflejen realidades diversas.
El acuerdo contempla también el intercambio de profesorado y personal técnico, así como la organización de talleres, seminarios, residencias artísticas y actividades culturales tanto en España como en Marruecos. La formación continua y el aprendizaje entre pares se erigen aquí como pilares de un sistema que, más que enseñar, busca acompañar procesos creativos colectivos. Por tanto, esta red no se limita a lo académico, sino que generará experiencias transformadoras para quienes participan. Y es que el cine es una herramienta educativa, pero también de convivencia, de diálogo y de construcción de identidad.
Desde Marruecos, la firma del acuerdo también ha sido recibida con entusiasmo. La Académie Marocaine de l’Audiovisuel, presidida por el reconocido actor y director Abdellatif Nassib Ben Elmesnaoui, ha subrayado la relevancia de este paso como vía para intensificar la cooperación artística con Europa. El propio Ben Elmesnaoui —figura destacada del cine y la televisión en el Magreb— ha expresado su voluntad de impulsar nuevas generaciones de creadores capaces de dialogar con el mundo. Alicante, en ese sentido, se convierte en una puerta de entrada, un nodo de conexión para talentos emergentes de ambas orillas.
Alicante como puerto de ideas
Para Alicante Film School, este convenio refuerza una vocación que ya venía tomando forma en los últimos años: la de convertirse en plataforma internacional para cineastas jóvenes, un espacio donde la técnica y la creatividad se alimenten del intercambio cultural. El cine se erige como un idioma común y este acuerdo señala un camino rodando y escuchando, contando desde Alicante, como un puerto de ideas.