VALÈNCIA. Hace tiempo que su nombre dejó de ser patrimonio quimérico de los iniciados en los horrores allende las estrellas: el genio enfermizo y soñador de Providence, cuya vida llegó a su fin sin permitirle conocer el éxito, es ahora parte de casi cualquier historia inquietante, sea esta literaria, audiovisual, o jugable. Es inevitable: las criaturas más prosaicas del terror, los monstruos tradicionales, palidecen ante las realidades del cosmos que vamos conociendo a medida que avanza la ciencia. Las posibilidades de la escala cuántica o las implicaciones de la geometría que es el universo son infinitamente más terroríficas e inhumanas que cualquier ser, por muchos colmillos o garras de las que disponga. El vislumbrar las propias dimensiones del tejido que habitamos ya es suficiente para sentir escalofríos electrizantes en la columna. Por no hablar de los enigmáticos agujeros negros y sus simas imposibles. En ese sentido, se podría decir que no ha habido momento más propicio para sus historias que el de ahora, puesto que cuanto más sabemos, más insignificantes nos sentimos, y más nos convencemos de que cualquier cosa es posible allí afuera. El horror cósmico, por tanto, está de moda. Lovecraft está de moda. Su círculo está de moda. Quién se lo iba a decir. A él, que aborrecería esta época y a quienes vivimos (o sobrevivimos) en ella. De esto también hemos sabido hablar: el autor, elevado a ciclópeos altares destinados a la adoración de los maestros, ha tenido que ser también analizado e interpretado, siendo uno de los mejores ejemplos de esa dicotomía autor-obra que tantos quebraderos de cabeza provoca. Sea como sea, hay un poco de Lovecraft en la mayoría de relatos que nos rodean. Hay Lovecraft hasta en las narraciones de aquellas personas que no saben quién es Lovecraft, porque como decíamos, los rasgos esenciales de su literatura son el signo de los tiempos, y de esos tentáculos, lamentablemente, no se puede huir.
Lo Más Leído
-
1Consell, Diputación y Alicante redoblan su compromiso por un centro de congresos 'definitivo'
-
2La textil Pastor y Navarro, en Onil, apuesta por la diversificación con una nueva línea de calcetines
-
3San Vicente presenta unos presupuestos de más de 56 millones que priorizan los servicios públicos
-
4El Campello adecúa su Plan de Inversiones para atender nuevas necesidades, ampliar proyectos y retrasar otros
-
5Se jodió el Perú
Suscríbete al canal de Whatsapp
Siempre al día de las últimas noticias
Suscríbete nuestro newsletter
Siempre al día de las últimas noticias
- ‘A propósito de Lovecraft’, canon sidéreo y magistral de Álvaro Aparicio · AlicantePlaza · Alicante Plaza
-
- ELCHE
- ALACANTÍ
- MARINA BAIXA
- ALCOY-EL COMTAT
- VEGA BAJA
- ELDA-VINALOPÓ
- MARINA ALTA
- COMUNITAT VALENCIANA
- CULTURA
- OPINIÓN
- FOTOGALERÍAS
- ESPAÑA
- INTERNACIONAL
- DEPORTES
- EDUCACIÓN
- TIERRA DE EMPRESAS
- SOSTENIBILIDAD
- SALUD Y VIDA
- PLAZA PODCAST
- REVISTA PLAZA
- PLAZA INMOBILIARIA
- CONSULTORIA
- Quiénes somos
- Publicidad
- Contacto
- Acceso accionistas
- Aviso legal
- Política de privacidad
- Cookies