ALICANTE. El ultimátum concedido por el Ayuntamiento de Alicante para el traslado de los puestos del mercado de artesanía tradicional de La Explanada continúa surtiendo efecto. Los últimos quince puestos que permanecían instalados en el paseo turístico han iniciado este viernes la retirada de sus casetas para reubicarlas de forma provisional, sin desmontarlas, en un solar libre situado en la pedanía ilicitana del Altet hasta que puedan disponer de respuesta de la Autoridad Portuaria para que pueda llevarse a cabo su previsible reubicación en la segunda línea del paseo marítimo, junto al edificio de la Lonja del Pescado.

Por el momento, la autorización del Puerto respecto a esa solicitud de concesión para ocupar esa franja del paseo seguiría pendiente del análisis de la documentación aportada por los comerciantes, según informan fuentes portuarias. Esa evaluación se habría prolongado después de que se requiriese la entrega de documentación complementaria que los vendedores no habían aportado con el registro de la petición. Se trata de información relacionada con el proyecto que se pretende desarrollar y con la adecuación del espacio, como la que se requiere para conceder otras autorizaciones similares, según las mismas fuentes.

Como mínimo, el traslado de las casetas -asumido por los propios comerciantes después de que se hubiese descartado su solicitud de continuidad provisional- trataría de evitar su desmantelamiento por parte del Ayuntamiento a partir del día 24 de febrero, como se había establecido en el decreto en el que se notificó la orden de retirada, en el caso de que los vendedores no hubiesen dejado el paseo libre en esa fecha límite. Al tiempo, en ese decreto se advertía de la repercusión de costes de ese desmontaje, que se había llegado a cifrar en unos 33.000 euros para el conjunto de los 30 puestos que ocupaban el paseo hasta mediados de enero. 

La comunicación de ese decreto llevó a parte de los comerciantes a iniciar su retirada. El proceso lo iniciaron los titulares de los puestos que habían renunciado a continuar ejerciendo la actividad, bien por encontrarse en situación de acogerse a la jubilación, o bien por no poder asumir el coste de reubicación en otro emplazamiento. A la postre, hasta quince vendedores habían optado por esa vía de la retirada voluntaria hasta este viernes, en el que se ha iniciado el traslado de los restantes.

Está por ver si la permanencia de esos últimos comerciantes hasta ahora conlleva la imposición de sanciones, toda vez que el plazo límite establecido por acuerdo de pleno para que se produjese la retirada de las casetas expiró el 31 de enero. Hasta el momento, el equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), ha mantenido que el proceso administrativo para garantizar el cumplimiento de ese acuerdo comenzaba a correr a partir de esa fecha, lo que conllevaría la aplicación de sanciones. No obstante, también se apuntó la posibilidad de que pudiesen ser proporcionadas en función de los avisos y las comunicaciones sobre las fechas de traslado que pudiesen aportarse por parte de los vendedores.