ALICANTE. Cambios en marcha en la ordenanza de limpieza de Alicante. El departamento de Limpieza y Gestión de Residuos ha abierto una consulta pública para admitir la presentación de sugerencias en el proceso de modificación de la normativa municipal a la que el equipo de gobierno (el bipartito compuesto por PP y Cs) quedó comprometido tras la aprobación del Plan Local de Residuos (PLR). El mismo edil de Limpieza, Manuel Villar, detalló este martes que, precisamente, se trata de ajustar la ordenanza a las nuevas directrices recogidas en el PLR, sin que, en principio, se contemple la posibilidad de introducir medidas adicionales.
Es más, no se prevé tampoco la posibilidad de incrementar el importe de las sanciones por incumplimiento, pese a que el equipo de gobierno sí ha venido manteniendo hasta ahora que los comportamientos incívicos que generan una sensación de suciedad en la vía pública no deberían salir gratis a los infractores y que, como mínimo, debería existir un mayor control efectivo sobre el cumplimiento de la ordenanza.
Por lo pronto, en esa consulta pública -con la que se podrán formular aportaciones durante un plazo de un mes- se insta a los interesados a precisar "los problemas que se pretenden solucionar con la iniciativa" de modificación de la norma; "la necesidad y oportunidad de su aprobación"; "los objetivos de la norma" y "las posibles soluciones alternativas regulatorias y no regulatorias".
Lo cierto es que la apertura de ese proceso de modificación de la ordenanza se produce en un contexto en el que se ha vuelto a reactivar el debate sobre la sensación de suciedad y la insuficiencia del servicio prestado, al multiplicarse las quejas vecinales y las críticas canalizadas a través de los grupos políticos que ejercen funciones de oposición. El mismo edil de Limpieza apuntó en una de sus últimas comparecencias al respecto que esa sensación de suciedad se había generado con la llegada del verano por la mayor afluencia de turistas y por el hecho de haber agotado las horas extra de refuerzo de las que sí se dispuso durante los dos veranos precedentes al no haberse consumido por la cancelación de las fiestas con motivo de la pandemia de la covid.