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entrevista

Mohammad Yunus: “Los bancos no han aprendido nada con la crisis. Estaban demasiado ocupados ganando dinero”

  • Muhammad Yunus. Foto: EVA MÁÑEZ

VALÈNCIA. Muhammad Yunus sigue paseando por el mundo con su eterna sonrisa. Nadie diría que es un Premio Nobel de la Paz, si no fuera por la paz que él mismo desprende... y por la confianza en el ser humano. Le recuerdo hace doce años, cuando le recibimos en Valencia premiado por la Fundación por la Justicia poco antes del Nobel. Ahora ha vuelto de la mano de la Fundación Novaterra y la cooperativa de consultoría para la transformación social y medioambiental Tándem Social, para presentar su nuevo libro, Un mundo de tres ceros. La nueva economía de pobreza cero, desempleo cero y cero emisiones netas de carbono. Pero también para abrir nuevos caminos hacia el emprendimiento en la sociedad actual.

Acaba de hablar durante más de dos horas. Llueve en València. El profesor Yunus necesita un pequeño descanso antes de responder las últimas preguntas a Valencia Plaza. Es todo sonrisa y amabilidad, y tiene un gran sentido del humor. No obstante, no esconde su preocupación por los últimos acontecimientos que han llevado al mundo a la crisis financiera más salvaje desde el crack del 29.


-Usted fue pionero en establecer un sistema de microcréditos para la gente pobre cuando creó el banco de los pobres, el Grammen Bank… ¿Cómo ha asistido a la caída del sistema bancario internacional, de los grandes tótems financieros?

-Cuando la banca colapsó en 2008, la economía y el mercado quiso volver al viejo sistema. Pero la crisis comenzó porque había algo fundamentalmente erróneo en ese sistema y no se podría volver atrás con el mismo sistema para llegar a los mismos errores. El mundo de los negocios estaba demasiado ocupado para volver a ocupar su lugar y los errores seguían produciéndose. Hoy, la crisis volverá porque están repitiendo los mismos errores, no han aprendido nada. Los bancos no aprendieron ninguna lección porque estaban demasiado ocupados ganando dinero.

-¿Y cómo piensa cambiar el sistema social sin cambiar el sistema económico?

La economía no está al servicio de la propiedad privada ni de los intereses individuales. Esto lo dijo otro Nobel. La economía rechaza tanto la supremacía del mercado como la del Estado, está al servicio del bien común y su objetivo es lograr un mundo mejor.  Los llamamos bancos… Deberíamos llamarlo Bancos de los Ricos. Es una trampa. Éste es el aspecto crucial. Tenemos que cambiar las palabras y cómo trabajamos. Empezar a trabajar con las personas que dejamos al margen.

Foto: EVA MÁÑEZ

-Esto parece muy utópico…

-Es lo que hemos hecho bajo una estructura que se hizo famosa, empezó a conocerse como microcréditos. Atacamos a los fundamentos del sistema bancario. Hemos eliminado las garantías y los avales, mientras todos los bancos se basan en ellos. Nosotros los hemos olvidado, no lo necesitamos. Funciona sobre la confianza. Ellos confían en nosotros y nosotros en ellos. Los pobres no disponen de avales.

-¿Cree que con ello se terminará la pobreza en el mundo?

-No hay ningún motivo para ser pobre. Nuestro jóvenes nos acusaran!: “¿Cómo permitisteis esto? ¿Cómo lo pudisteis tolerar durante años, siglos…?”. Cuestionarán nuestra capacidad de criterio, de juicio y de resolver cuestiones que se pueden resolver rápidamente.

-¿Cómo hay que hacerlo?

-Podemos comparar un bonsai con la pobreza. Se toma una semilla de un árbol muy alto y lo colocamos en una maceta para que crezca. Pero no crece como el árbol del que procede su semilla. La semilla es buena, pero no dispone de suficiente tierra. Los pobres son personas bonsai. No hay nada malo con su semilla. Pero no disponen de su espacio necesario.

-¿Y todo tiene que ver con la financiación?

-No sólo. Hace falta un cambio de mentalidad y un cambio en nuestro sistema educativo, que machaca las semillas y persiste en lo que se ha hecho anteriormente. Hay que potenciar el emprendimiento y la empresa social. Creamos una campaña con Danone para abordar el problema de la hambruna de Bangladesh. El 20% de los vegetales que no cumplen estándares de color y tamaño, feas, se desechan en Europa. Mcain recoge estos vegetales y los transforma en vegetales cortados para distribuir. También crearon sopas. Porque no todo el mundo hace empresas sociales? Porque el capitalismo interpreta mal al ser humano, como un ser egoísta, y ha convertido a todos los seres humanos como maquinas de hacer dinero.

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