ALICANTE. El Patronato Municipal de Turismo de Alicante inicia trámites para contar con un nuevo adjudicatario para el servicio de vigilancia y socorrismo en playas tras el desestimiento del concurso promovido el pasado mes de diciembre con el objetivo de incorporar los medios necesarios para extender su cobertura hasta la Playa de San Gabriel. La Junta Rectora del Patronato ha aprobado por unanimidad volver a licitar el contrato para que incluya a esta playa tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ CV) que la califica como playa urbana, con lo que se pretende dotarla de los servicios existentes en el resto de arenales de Alicante.
Todos los grupos políticos y las asociaciones del sector representados en el Patronato (entre los que no figura Esquerra Unida Podem por la composición contemplada en sus estatutos) han votado a favor de desistir en la tramitación del contrato de salvamento y socorrismo, que se encontraba en el trámite de clasificación, y volver a licitarlo para que incluya a la playa de San Gabriel y Babel, con lo que serán seis las playas que se incluirán en el pliego.
La concejala de Turismo, Ana Poquet, ha explicado, a través de un comunicado, que "es la mejor solución para garantizar que el servicio se presta en igualdad de condiciones en las playas de Alicante" y ha recordado que "la prestación del servicio de salvamento y socorrismo está garantizada en todas las playas hasta que se adjudique el nuevo contrato".
En este sentido, fuentes municipales han señalado que la próxima Semana Santa se prestará el servicio habitual en las cinco playas como se venía realizando y será con el nuevo contrato, que se prevé pueda estar adjudicado para la temporada de verano, cuando se incluirá a San Gabriel y Babel. En caso de que la adjudicación se dilate por causas ajenas a la tramitación municipal se continuará prestando el servicio como hasta ahora hasta que el nuevo contrato se adjudique.
Asimismo, el nuevo contrato mantendrá las mejoras previstas tanto en personal como en medios materiales y más horas de vigilancia con una gestión más flexible de las mismas. El nuevo contrato saldrá a licitación por tres años prorrogables a dos más, tal y como se preveía. Además, la playa de San Gabriel y Babel también dispondrá de pasarelas y lavapiés el próximo verano.
Eso sí, a pesar de que el acuerdo ha prosperado por unanimidad, no se ha escatimado el debate al respecto. En primer término, la edil del PSOE, Trini Amorós, ha mostrado la conformidad del grupo socialista con la paralización del proceso para la adjudicación del contrato, aunque ha señalado que el PSOE "ha venido reclamando esta paralización desde mitad de diciembre, cuando se conoció la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) que da la razón a la asociación de vecinos Gran Vía Sur Puerto y que reconoce formalmente esta zona de baño". "Lo que ha hecho el gobierno de Barcala ha sido perder dos meses desde que el TSJCV dio la razón a los vecinos y vecinas", ha añadido.
Por su parte, el portavoz de Compromís, Rafa Mas, ha instado a los responsables del Patronato a aprovechar la nueva licitación para incorporar más medios humanos y materiales en la prestación del servicio, con propuestas como la posible incorporación de drones que puedan prestar un servicio de videovigilancia "como el que ya se presta en localidades como Fuengirola", ha señalado. Además, también ha conminado a extender la prestación durante un mayor número de meses, así como a ampliar la cobertura del servicio de playas accesibles.
Al tiempo, Amorós ha intervenido en el transcurso de la Junta para reprochar a la concejala de Turismo "que la ciudad siga sin disponer de un espacio habilitado para ordenar el turismo de caravanas". "Estamos ya en la antesala de la campaña de Semana Santa y el equipo de gobierno de Barcala ha sido incapaz de solucionar una cuestión que se viene arrastrando desde 2021, cuando se desmanteló el área habilitada en la playa de San Juan", ha incidido, a través de un comunicado.
Amorós ha reclamado a la responsable de Turismo, Ana Poquet, que se ponga a trabajar en ese asunto para que la capital provincial no llegue de nuevo a la campaña estival sin tener una zona preparada para este tipo de vehículos. "Las consecuencias de no haber sido capaces de habilitar un área con los servicios que demanda este tipo de turismo, como son zonas de estacionamiento y conexiones de agua y electricidad, es que que muchos de los conductores aparcan en zonas urbanas que generan molestias a determinados vecindarios. Por tanto, lo mejor es regularlo cuanto antes", ha añadido la concejala socialista.
En este mismo encuentro, Amorós ha reprochado a los responsables municipales que sigan sin convocar la mesa de trabajo acordada para evaluar los efectos negativos que las obras del centro de la ciudad han tenido en el turismo. “No se ha hecho nada. La dejadez del alcalde es inaceptable”, ha concluido la edil.