ALICANTE. Se avecinan nuevos cambios en la ordenación del tráfico en la ciudad de Alicante, a la estela del inicio de la peatonalización del Centro Tradicional y de la confirmación de la subvención de 15,1 millones de la Unión Europea (UE) para el desarrollo de una Zona de Bajas Emisiones (ZBE). En esta ocasión, se trata de dos proyectos de reurbanización que afectan a otros dos puntos de la trama urbana sometidos a un tráfico intenso: el Paseo de los Mártires de la Libertad, en el frente marítimo de la Explanada, y la avenida de Aguilera.

El equipo de gobierno, el bipartito compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), prevé validar este martes, en Junta Local, el impulso de los dos proyectos con la intención de acelerar la contratación de los trabajos de reestructuración de ambos puntos. En primer término, la propuesta planteada sobre el Paseo de los Mártires de la Libertad plantea la reurbanización de sus cuatro carriles actuales mediante la instalación de una mediana ajardinada central con el fin de ralentizar la velocidad de la circulación. 

Como avanzó este diario, se trataría de una primera fase de la remodelación de ese espacio para la que ya se ha previsto etapas sucesivas de reducción de carriles disponibles en cuanto se pueda disponer de otros ejes alternativos con la capacidad de absorber los desplazamientos que ahora se desarrollan en el borde litoral, como la Vía Parque, todavía pendiente de que se acometa la ampliación de su número de carriles en varios de sus tramos. Fundamentalmente, entre la avenida de Orihuela y Rabasa. Al tiempo, en la última fase de esa propuesta de planificación, se plantea incluso la reserva de espacio ante la posibilidad de que pueda prolongarse el trazado de la actual Línea 5 del tranvía en dirección a los barrios de la zona sur.

El proyecto (que quedó pendiente de aprobación en Junta de Gobierno la pasada semana a falta de que se aportase un último informe de la Concejalía de Tráfico) respeta la continuidad de los cuatro carriles actuales, aunque reduce su amplitud actual y amplía el número de pasos peatonales entre la Explanada y el paseo del Puerto para forzar a los conductores a aminorar su velocidad de marcha.