Uno de los ferrys de la conexión, en el Puerto de Alicante. ALICANTE. Cambios en la Operación Paso del Estrecho desde Alicante, respecto a su organización habitual en la etapa prepandemia. La Empresa Nacional de Transporte Marítimo de Pasajeros (ENTMV), también conocida como Algérie Ferries, ha decidido reducir el servicio a prestar desde el Puerto de Alicante a solo un barco semanal en el primer verano en el que se han levantado la mayor parte de las restricciones sanitarias a los desplazamientos, frente a las tres embarcaciones que solían habilitarse hasta 2019.
Además, ese único buque solo zarpará desde aguas alicantinas un día a la semana (el sábado) frente a los varios trayectos que se venían operando hasta ahora durante la campaña estival, en la que gran parte de los residentes argelinos en Francia suele desplazarse hasta su país natal para pasar las vacaciones. Ahora, la mayor parte de ese tráfico queda concentrado en el Puerto de Marsella. En realidad, ese será el punto de salida para todos los desplazamientos hasta Argel, ya que desde Alicante solo se cubrirá el trayecto hasta el Puerto de Orán.
Así se comunicó oficialmente al Ministerio del Interior, a mediados del pasado mes de mayo, en un contexto en el que ya emergían las tensiones políticas entre Argelia y España que han desembocado en la suspensión del tratado de amistad, por parte del país magrebí, en base a la posición mantenida por el Gobierno español sobre el Sáhara Occidental. Esa decisión ya ha forzado a la Subdelegación del Gobierno en Alicante a reorganizar el dispositivo de Seguridad y de Sanidad Exterior que se había comenzado a planificar a principios del mes pasado ante el inicio de la OPE, el próximo miércoles, 15 de junio.
En concreto, tras una primera reunión preparatoria celebrada el 11 de mayo, se concretó que la Guardia Civil destinaría 90 agentes diarios y la Policía Nacional otros 70 para garantizar la seguridad y el orden público en el entorno de la terminal marítima, ante la previsión de que pudiese registrarse un incremento de pasajeros tras el paréntesis forzoso de la pandemia, que llevó a interrumpir la conexión. De hecho, entonces se barajaba que 33.000 usuarios y 9.600 vehículos recalasen en el Puerto de Alicante para zarpar rumbo a Argelia.
La empresa estatal que opera la línea informó sobre las nuevas condiciones de la campaña estival a mediados del mes de mayo, cuando ya se había organizado un dispositivo con 160 agentes en el entorno de la terminal
Por ello, el operativo trazado entonces preveía que los viajeros llegasen a la terminal con billetes cerrados en los que se indicase la fecha y hora del embarque para evitar la aglomeración de personas y vehículos. Además, se acordó aumentar la zona de sombra donde se realiza la asistencia social, sanitaria y las actividades lúdicas, así como la renovación del mobiliario y el suelo de las zonas infantiles. Además, se ha colocado nebulizadores de agua y se ha incrementado en un 50% las zonas de sombra del aparcamiento en la zona de preembarque. En principio, tras la reducción del servicio se prevé mantener esas mejoras en las infraestructuras, pero se reducirá el número de agentes y de profesionales dedicados a prestar asistencia a los viajeros, ya que no se espera las aglomeraciones que se auguraban hasta hace menos de un mes.
Como informó Alicante Plaza, el Puerto de Alicante recuperó la conexión marítima con Argelia a finales del pasado octubre, después de que quedase interrumpido con la declaración del primer estado de alarma, en marzo de 2020. A partir de entonces, se preveía reestablecer la frecuencia habitual de un desplazamiento semanal hasta la península con salidas alternas desde los puertos de Orán y de Argel, con la previsión de que se incrementase para atender el tránsito vinculado a los desplazamientos estivales, entre el 15 de junio y el 15 de septiembre. No obstante, ese aumento del servicio no llegará a producirse.
