El edificio de Altamira 19 destinado a albergar el Museo de Belenes. Foto: APALICANTE. Obras en marcha con un hotel en el horizonte en el que, por ahora, todo son incógnitas. La empresa Construcciones Ricardo Sánchez, Corisa, que adquirió el edificio de propiedad municipal situado junto al Ayuntamiento de Alicante en pública subasta el pasado mes de agosto, acaba de iniciar el trabajo de desescombro interior del inmueble con el propósito de poder cuadrar el diseño arquitectónico que tendrá el futuro establecimiento hotelero. Según las fuentes consultadas por Alicante Plaza, la compañía no ha determinado todavía ni su calificación (estrellas) ni el número de habitaciones que ofertará, ya que necesita llevar a cabo las últimas mediciones, con espacios diáfanos y sin la tabiquería interna, para decantarse por un modelo de negocio concreto: más habitaciones y categoría media, o menos habitaciones, más servicios y más categoría.
Hasta la fecha, sobre el proyecto sólo existen dos únicas certezas: que su diseño corre a cargo del reconocido arquitecto Javier García Solera y que tendrá que conservar necesariamente tanto su número de alturas como su fachada. El inmueble ocupa la manzana comprendida entre la calle Mayor, el Pórtico de Ansaldo, la calle Altamira y el Pórtico de Ansaldo y está literalmente unido al edificio histórico del Ayuntamiento. Está catalogado como edificio de protección general en el Plan Especial del Casco Antiguo (PECA) y forma parte del entorno de protección del Bien de Interés Cultural (BIC) que constituye el Ayuntamiento. Es más, el PECA (aprobado en 2004, bajo la etapa de Gobierno del PP de Luis Díaz Alperi) le asignaba un uso socio-cultural concreto: estaba destinado a convertirse en emplazamiento de un futuro Museo de Belenes. No obstante, una modificación posterior de ese plan (la número 3) daba cabida a su uso hotelero.
El tripartito convocó la subasta en mayo con un precio de salida de 1,1 millones más IVA y cerró la adjudicación en agosto por 1,5
El nuevo equipo de Gobierno, formado por PSOE, Guanyar y Compromís, se acogió a esa posibilidad para plantear su subasta. La convocatoria del proceso se aprobó el pasado mes de mayo con un precio de salida de 1.126.795 euros más IVA (de acuerdo con el informe de tasación municipal) y la adjudicación se cerró finalmente en agosto, por un importe de 1.530.650 euros, en favor de Corisa. Hubo al menos un segundo licitador (Ebano Properties SL), pero su oferta fue descartada al no cumplir los requisitos de la subasta.
El edificio, con entrada desde la calle Mayor, 24, tiene una superficie registral de 1.199,42 metros cuadrados que se distribuyen en planta baja y 3 alturas en la calle Mayor y baja y 4 alturas en Altamira. En su planta baja preexisten un comercio y un restaurante, de propietarios particulares, que se respetarán e integrarán en el proyecto del futuro hotel. El Ayuntamiento adquirió el 84,9% de la propiedad del inmueble a través de una permuta con la Generalitat en el año 2002.
