Benidorm en una imagen de archivo. Foto: RAFA MOLINA.BENIDORM, (EP). El presidente de la Asociación bares, restaurantes y cafeterías de Benidorm (Abreca), Javier del Castillo, ha lamentado que entre un 20 y un 25% de los 1.400 locales de la ciudad turística no volverán a abrir cuando termine el estado de alarma porque "muchísimos" no podrán hacer frente a las deudas que arrastran y acumulan estando cerrados.
Además, ha alertado de que tampoco podrán mantener el personal que tenían ante un verano que ha tipificado de "atípico" en el que no se espera la llegada de clientes extranjeros. "El resbalón va a ser gordo", ha opinado.
En declaraciones a Europa Press, este miércoles, Del Castillo ha dicho que los socios de Abreca están "bajo mínimos y muy preocupados", han tenido que ejecutar un ERTE y pedir préstamos ICO para hacer frente al pago de "impuestos, alquileres y lo que marca el día a día". Asimismo, ha dicho que se hace "muy complicado" llegar a final de mes y hacer frente a "proveedores y acreedores", a los que, según ha enfatizado, "hay que ir pagando".
El presidente de Abreca se ha mostrado confiado en poder volver a abrir los negocios "a primeros de junio" y "empezar a funcionar". Ha estimado que el tipo será "local y nacional" y ha indicado que no se espera "turismo internacional".
Por ello, ha hablado de un verano "bastante tranquilo" en el que habrá "mesas separadas" en los locales y "menos personal".
"Tenemos un malestar por no saber qué va a ocurrir este verano", ha apuntado y aunque no ha querido calificar de temporada "perdida" sí ha indicado que "no será un verano típico, no se va a trabajar como otros". Además, ha alertado de que "si los hoteles no abren hasta 2021, tendríamos que tirar de segunda residencias, apartamentos", lo que supondría la llegada de un número "menor" de turistas "bastante importante".
Entre otras cuestiones, Javier del Castillo ha comentado la posibilidad de tener que instalar mamparas y la manera en que deberán ser tratadas para que permanezcan desinfectadas o el caso de las cartas de los restaurantes que no podrán ser las mismas cada vez. En ese sentido, ha dicho que se busca dar una respuesta con manteles con la carta impresa o repartir folios cada vez.
Asimismo, ha dicho que se busca para los alquileres de locales "alguna ayuda o de no pagar hasta poder ponernos en marcha".
