Vox exige que la toma de posesión de Puig no sea "un despilfarro" de dinero público

VALÈNCIA (EP). El grupo parlamentario de Vox ha confirmado este viernes al presidente de Les Corts, Enric Morera, que no apoyará "en ningún momento" la candidatura del socialista Ximo Puig a revalidar como 'president 'de la Generalitat durante la próxima legislatura y ha exigido que su toma de posesión no suponga un "despilfarro de dinero público" si se celebra finalmente el próximo domingo 16, tras el debate de investidura del miércoles 12.

"Vamos a pelear porque se cumpla el principio de pluralismo político que contiene la Constitución y vamos a ejercer una oposición dura", ha aseverado la síndica de Vox, Ana Vega, en declaraciones a los medios en los pasillos de Les Corts tras la reunión con Morera. Se trata de la primera dentro de la ronda de contactos con los seis grupos para conocer su posición de cara a la investidura de Puig.

En este contexto, los de Vox ven "evidente" su postura de no apoyar "en ningún momento" la reelección del jefe del Consell para los próximos cuatro años, con el respaldo de Compromís y Unides Podem y la reedición del acuerdo del Botànic.

Sobre la toma de posesión, estarían de acuerdo a que se haga en domingo "siempre que haya una contención y sea un gasto perfectamente asumible y comprensible, no un despilfarro de dinero público" al celebrarse en un día no laborable.

Para Vox, esto contrasta con la postura de Podem, que también manifestó su rechazo a que fuera en domingo, mientras "se van a ampliar nuevamente las consellerias para darles el gusto de tener su cuota de poder", lo que creen que supone "un gasto excesivo para los ciudadanos".

"Dar cuotas de poder"

Eso sí, reconocen que el presidente de Les Corts les ha trasladado que "siempre están por la labor" de contener el gasto, y exigen que "sea una realidad de una vez". "Volvemos al despilfarro de dinero simplemente para dar cuotas de poder a los amigos del gobierno", ha denunciado Vega.

Respecto a su proyecto de oposición para los próximos cuatro años, los diputados de Vox pretenden recurrir el hecho de que no ocupen ninguna de las comisiones parlamentarias, que arrancaron este pasado jueves.

Su intención es "ejercer una oposición dura y siempre con los principios del partido: eliminar la corrupción política que está arraigada en todas las instituciones y una contención del gasto público". "Y llevar nuestras ideas, principios y valores, que es para lo que nos han votado al fin y al cabo", ha zanjado la síndica.