VALENCIA. La constructora Torrescamara y la firma de transporte Laumar Cargo -los dos socios privados de la transportista ferroviaria Logitren- negocian la compra del grueso de las acciones que posee en la compañía Ferrocarrils de la Generalitat (FGV).
Así lo confirman a Valencia Plaza fuentes del entorno de la empresa, que indican que se trata de un acuerdo entre los tres socios actuales de la mercantil, donde FGV y Torrescamara poseen un respectivo 38,27% cada una y Laumar Cargo, el 23,46% restante. La operación está muy avanzada y podría cerrarse este mismo año.
Tanto Torrescamara como Laumar Cargo están dispuestas a acogerse a su derecho de suscripción preferente tras manifestar FGV su voluntad de vender su participación en Logitren, tal y como recogió la empresa pública en sus cuentas anuales de 2015. FGV valoró su participación en 334.481 euros.
Su entrada en esta firma se concibió como un respaldo de la Generalitat a la puesta en marcha de una empresa valenciana en el complejo sector del transporte de mercancías por ferrocarril. Ahora, tras alcanzar Logitren una senda positiva, FGV ha decidido desinvertir.
Pese a la venta, la intención de Ferrocarrils de la Generalitat es conservar parte de sus acciones, entre un 5% y un 10%, según indican las mismas fuentes. El resto de su participación se repartiría de forma ponderada entre Torrescámara y Laumar, quedando la constructora con el control de la sociedad al poseer más del 50% de los títulos.
La salida de FGV se produce, probablemente, en el mejor momento de Logitren, que registró en 2015 sus primeros beneficios desde 2009. Su resultado neto fue exiguo, pero le permite abandonar una larga senda de pérdidas y afrontar su nueva etapa desde un buen punto de partida.
Por lo que respecta a la facturación, Logitren ingresó 4,9 millones de euros el año pasado, una cantidad prácticamente idéntica a la de 2014. La compañía espera rebasar los 5 millones en el presente 2016, en el que también cerró en positivo el primer semestre.
Logitren es en la actualidad la tercera empresa privada de transporte de mercancías por ferrocarril tras Comsa y Continental, y sigue haciéndose hueco en este difícil mercado marcado por el dominio de Renfe.
La empresa presume de su servicio de 5 trenes de ida y vuelta entre Valencia y Madrid, de sus tráficos largos entre Granollers y San Roque -trayecto que realiza 3 veces a la semana- y de su "alto porcentaje de fiabilidad en seguridad y en tiempos de tránsito".