MADRID (EP). El Tesoro Público ha colocado 4.953 millones de euros en una nueva subasta de bonos y obligaciones, dentro del rango medio previsto, y lo ha hecho a tipos aún más bajos en las cuatro subastas de este jueves, en un momento en el que la prima de riesgo se mantiene estable en el entorno de los 80 puntos básicos.
Aunque los inversores siguen confiando en los títulos de la deuda pública española, la demanda conjunta de las cuatro referencias se ha situado en los 6.890 millones de euros, mucho más baja de lo que suele ser habitual en las subastas del Tesoro, en las que las peticiones se acercan muchas veces a duplicar lo finalmente colocado en los mercados.
En concreto, en la subasta anterior del bono a cinco años, celebrada el 1 de marzo, el Tesoro colocó 1.605 millones, frente a peticiones de 3.025 millones, casi el doble; mientras que en esta ocasión ha colocado 1.814,62 millones, pero las peticiones se han situado en 2.629 millones, con un ratio de 1,5 veces. El tipo marginal ofrecido en esta subasta se situó en el 0,315%, inferior al 0,37% ofrecido en la subasta anterior.
En las obligaciones a 10 años, la demanda en esta ocasión también fue muy inferior a la registrada el pasado 15 de febrero, cuando el Tesoro colocó con esta referencia 1.960 millones, frente a una demanda que se acercó a los 5.000 millones, más del doble. En cambio, este jueves ha colocado 1.612 millones y las peticiones han superado ligeramente los 2.000 millones. La rentabilidad marginal ofrecida se ha situado en el 1,385%, también por debajo del 1,586% de la emisión anterior.
El Tesoro también ha vendido entre los inversores 719,40 millones de euros en la obligación a 15 años, con una demanda muy ajustada de 1.184 millones. El pasado 15 de febrero, cuando subastó este misma referencia, la demanda superó los 3.500 millones y se colocaron unos 1.910 millones. El tipo marginal se ha colocado en el 1,899%, menor que el 2,113% anterior.
Por último, el organismo dependiente del Ministerio de Economía ha colocado 806,10 millones de euros a 30 años, frente a una demanda ligeramente superior (1.013 millones), y lo ha hecho ofreciendo un tipo marginal del 2,189%, también inferior al 2,467% de la subasta previa celebrada el 2 de noviembre. La demanda también ha sido mucho menor, ya que en esa ocasión superó los 1.400 millones y se colocaron 942 millones.
Con las subastas de esta semana, el organismo dependiente del Ministerio de Economía cierra las emisiones del mes de marzo y no regresará a los mercados hasta abril, cuando celebrará cuatro nuevas emisiones, dos de letras y otras dos más de bonos y obligaciones.
