VALÈNCIA. (EP) El 61% de los españoles considera que el Certificado Verde Digital es una "buena iniciativa" para reactivar la libertad de movimiento dentro de la Unión Europea y más de la mitad la ve efectiva para evitar la propagación del virus, según una encuesta realizada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) junto con las organizaciones miembro de Euroconsumers --Altroconsumo, Deco Proteste, y Test -Achats--.
Esta encuesta tiene el objetivo de valorar, entre otros aspectos, la información de la que disponen los ciudadanos sobre las vacunas, la disposición a vacunarse, el impacto del caso AstraZeneca en la percepción sobre la vacunación o la puesta en marcha de un pasaporte de vacunación. La encuesta realizada entre el 26 y 30 de marzo se comprende una muestra de personas de entre 18 y 74 años.
El 40% de la población española se considera bien o muy bien informada. Consideran tener más información sobre la eficacia de las vacunas que sobre los efectos secundarios. No obstante, comparando con una encuesta similar realizada en enero de 2021, ha crecido en 10 puntos el porcentaje de personas que considera que está ahora mejor informada sobre estos efectos secundarios.
La disposición a la vacunación se puede considerar alta en España. En el supuesto caso de que les avisaran para en una semana el 52% de los encuestados lo haría sin dudarlo y un 29% probablemente. España (82%) es, seguida de Portugal (85%), el país --de los cuatro participantes en la encuesta-- donde hay más predisposición a vacunarse. En Italia (76%) y en Bélgica (74%) hay una menor disposición.
OCU considera que esta información es clave para que la campaña de vacunación sea efectiva. De hecho, la información y la edad son los factores más significativos relacionados con la disposición a vacunarse. Cuanto mejor informado se considera el ciudadano, mayor será su disposición a vacunarse lo antes posible. Por otro lado, los encuestados mayores de 50 años están más dispuestos a vacunarse lo antes posible, mientras que aquellos por debajo de 30 se encuentran en el polo opuesto.
Las principales razones para no vacunarse son el miedo por los posibles efectos secundarios de la vacuna (58%), la falta de confianza en ciertas vacunas Covid-19 (39%), y la falta de confianza en el proceso de elaboración y aprobación de las vacunas (30%).
En relación con la decisión del Gobierno de suspender durante unos días la administración de la vacuna de AstraZeneca (en marzo), el 57% se posiciona a favor y casi un 20% en contra, siendo 1 de cada 4 los que no tienen clara su posición.
En cualquier caso, el 39% de los encuestados declara sentirse altamente preocupado por los potenciales efectos secundarios de la vacuna de AstraZeneca. Para el resto de las vacunas, ese porcentaje desciende al 10%
Además, el caso de AstraZeneca está teniendo una repercusión negativa en las percepciones de la población. Por ejemplo, el 45% de los encuestados ha visto mermada su confianza en la organización del proceso de vacunación debido a los últimos acontecimientos relacionados con esta vacuna.
El 66% considera que se deberían ofrecer pruebas PCR gratuitas a quienes no han sido vacunados para poder conseguir el pasaporte de vacunación. Este porcentaje desciende al 41% si hablamos de ofrecerlas a los extranjeros que visiten España.
Por otro lado, más de la mitad de los encuestados temen que este sistema pueda generar discriminaciones entre las personas vacunadas y las que no lo han sido. Asimismo, casi la mitad muestra preocupación por el uso que se pueda hacer de los datos almacenados en el pasaporte de vacunación.
OCU considera que los ciudadanos de la Unión Europea deben tener un acceso equitativo a este certificado, y que, en todo caso, las restricciones deben ser "no discriminatorias, coordinadas y proporcionadas".